Revlon acelera su reestructuración para ahorrar 95 millones hasta 2023

Revlon expande su reestructuración. La compañía ha ampliado su plan de ajuste hasta 2023 bajo el nombre Revlon Global Growth Accelerator, que se estructura en torno a tres iniciativas: el aumento de las ventas, la reducción de gastos y la inversión en formación.

La empresa, que opera también con la marca Elizabeth Arden, se centrará en tres pilares, marcas, mercados y canales, para crecer a medio dígito de media al año hasta 2023. Por su parte, con las reducciones de costes la empresa prevé ahorrar 95 millones de dólares hasta 2023 y seguir mejorando su margen.  

Revlon pretende además de implementar mejorar laborales que permitan mejorar las capacidades de los trabajadores con el fin de “generar un cambio transformador”, según ha indicado la compañía.

 El nuevo plan está centrado en mercados y canales clave: Estados Unidos; Europa, Oriente Próximo y África, y China. Además, el negocio digital de la empresa se ha convertido en una pieza clave de este nuevo programa.

Revlon ha reducido su facturación en el primer trimestre pero ha mejorado su resultado neto

“Continuamos anticipando una recuperación en la demanda de productos de cosmética a medida que las restricciones por la pandemia disminuyen a escala mundial y con este nuevo programa estaremos bien posicionados para aprovechar las oportunidades futuras para Revlon”, ha indicado la consejera delegada de la compañía, Debbie Perelman.

Este plan se ha dado a conocer coincidiendo con la presentación de resultados del primer trimestre del año, con cierre el 31 de marzo. La compañía ha facturado 445 millones de dólares, frente a los 453 millones de dólares del mismo periodo del ejercicio anterior, lo que supone un descenso del 1,8%. Las ventas a través del canal digital crecieron en este periodo un 13%.

Pese al descenso de las ventas, la empresa ha mejorado notablemente su resultado neto, con unas pérdidas de 96 millones de dólares, frente a los 213,9 millones de dólares del mismo periodo del año anterior.

El grupo estructura su negocio en cuatro divisiones: Revlon, Elizabeth Arden, Portfolio (que incluye marcas como American Crew, CND o la línea de color de Llongueras) y Fragancias (con firmas como Juicy Couture, Britney Spears o Halston, entre otras).

La división de Portfolio fue la que peor evolucionó, con un descenso del 12,7%. Le siguió Revlon, con una caída del 10,9%, aunque continúa siendo ampliamente la más importante para el grupo. Elizabeth Arden, la segunda mayor marca por facturación, anotó un crecimiento del 17,9%, mientras que las fragancias engordaron su negocio un 13,3%.