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Bimba y Lola cambia su ‘mix’: menos tiendas y más corners y dispara ventas en Oriente Medio

La empresa gallega ha ido reduciendo su red de tiendas propias y franquicias, a la vez que eleva presencia en grandes almacenes. Los ritmos de crecimiento están lejos de los de 2018, cuando alcanzó una valoración de 500 millones.

Bimba y Lola cambia su ‘mix’: menos tiendas y más corners y dispara ventas en Oriente Medio
Bimba y Lola cambia su ‘mix’: menos tiendas y más corners y dispara ventas en Oriente Medio
La compañía cerró el ejercicio 2023 (concluido en febrero de 2024) con un aumento de las ventas de sólo el 0,87%.

Pilar Riaño

26 sep 2024 - 05:00

Seis años después de que Bimba y Lola tontease con el capital riesgo para abrir su accionariado, la compañía gallega cambia de enfoque en su estrategia de distribución. La compañía ha pasado a concentrar el grueso de su desarrollo en los corners en grandes almacenes, mientras reduce posiciones tanto en tiendas propias como en franquicias. Aunque España sigue copando el grueso de las ventas de la empresa, el negocio en Oriente Medio se dispara hasta cerca de 58 millones tras entrar en Israel.

 

La Bimba y Lola de hoy es diferente a la de 2018, cuando las ventas crecían a doble dígito y el resultado bruto de explotación crecía a más del 30% (según datos del ejercicio 2017). La empresa negoció con inversores por primera vez en 2013 pero terminó cancelando el proceso. A finales de 2017 volvió a abrir conversaciones y en aquel momento se puso sobre la mesa una valoración de entre 450 millones y 500 millones de euros, con un múltiplo de ebitda de entre 13 y 15. El proceso también se canceló y se dio inicio a un plan estratégico hasta 2022.

 

La compañía cerró el ejercicio 2023 (concluido en febrero de 2024) con un aumento de las ventas de sólo el 0,87%, hasta 226,87 millones de euros. Con gastos de aprovisionamiento un 2,45% superiores a los de 2022 y gastos de personal un 5,98% mayores, el resultado de explotación de la compañía se situó a cierre de 2023 en 9,22 millones de euros, un 42,2% menos. El resultado neto, por su parte, se redujo a la mitad, con una caída del 47,08%, hasta 6,14 millones de euros.

 

 

 

 

Con una plantilla de 1.696 empleados a febrero de 2024, la Bimba y Lola que abría tiendas propias de forma directa por todo el mundo ha dado paso a una empresa más basada en los corners y en la que mercados en los que opera con socios son los que más crecen.

 

La compañía cerró el ejercicio 2023 con una red de 289 puntos de venta, tres más que doce meses antes y con 139 de ellos ubicados fuera de España. Del total de puntos de venta de la empresa, 150 son tiendas propias, 22 son franquicias y 117 son corners en El Corte Inglés y El Palacio de Hierro. En el ejercicio 2023, la empresa ha cambiado su mix de distribución, reduciendo los puntos de venta propios y las franquicias y aumentando los corners.

 

Por número de tiendas, España se mantiene como el primer mercado de la compañía con un total de 150 puntos de venta. A continuación figura México, con 44 establecimientos y donde opera con El Palacio de Hierro. El tercer mercado de la compañía es Portugal, con 21 puntos de venta, y el cuarto, Chile, con diez puntos de venta.

 

 

 

 

La compañía concentra el grueso de sus ventas en España. Sin embargo, desde sus inicios tuvo vocación exportadora, comenzando el proceso de internacionalización en Portugal, para continuar en Francia en 2003, para posteriormente dar el salto a mercados como Reino Unido, Alemania, Polonia, México, Chile o Corea del Sur.

 

Las ventas del grupo en 2023 sólo crecieron en dos territorios: España, donde se elevaron un 7,61%, hasta 130,9 millones de euros, y Oriente Medio, donde la compañía disparó sus ventas hasta 57,73 millones de euros, desde los 1,06 millones de euros de 2022. En la Unión Europea (excluyendo España), América y Asia, las ventas de Bimba y Lola se redujeron un 14,09%, un 87,57% y un 88,64%.

 

La compañía sumó tres mercados a su red de distribución en 2023, adentrándose en Estados Unidos, Puerto Rico e Israel, abriendo filiales en los dos primeros mercados. “La estrategia de expansión del grupo se basa tanto en fomentar y fortalecer la presencia en mercados donde Bimba y Lola está presente, como en abrir tiendas en nuevos mercados internacionales”, explica la empresa, que tiene como prioridades Europa, América y Asia.

 

Aunque la compañía no ha desvelado si ha trazado un plan estratégico más allá de 2022 ni los ejes del mismo, la Bimba y Lola de hoy es una compañía que trabaja para elevar su posicionamiento, con mayor estructura empresarial y más profesionalizada.

 

La empresa se ha aliado, por ejemplo, con el diseñador Palomo Spain para lanzar colecciones conjuntas y desfilar en Nueva York, al tiempo que está realizando un importante esfuerzo de posicionamiento con personajes clave del sectorinfluencers.

 

 

 

 

 

La empresa, que ultima la puesta en marcha de una nueva sede corporativa en Vigo para dar respuesta al crecimiento de su estructura, cuenta con un consejo profesionalizado al que ha incorporado a perfiles de diferentes ámbitos.

 

Propiedad de la familia Domínguez, Bimba y Lola tiene a su consejo de administración como máximo órgano de gestión. El consejo está integrado por Uxía Domínguez (a través de la sociedad Querida Carmen), fundadora; María Domínguez (a través de Tresemes 2017); Sylvie Lelache; Jesús Domínguez; Fernando Martínez Albacete; José Manuel Martínez, consejero delegado; José María Castellano, y Cristina Trujillo Parra.

 

La compañía está liderada por José Manuel Martínez, consejero delegado de la compañía desde noviembre de 2018. El ejecutivo cuenta una larga trayectoria en el sector, que incluye la dirección de diferentes áreas en Inditex durante nueve años y su cargo como consejero delegado de Esprit durante seis años. Actualmente, Martínez también está presente en los consejos de administración de Ecoalf, desde diciembre de 2019, y Asos, desde el año pasado.

 

Uxía Domínguez y María Domínguez, las dos hermanas fundadoras de Bimba y Lola, actúan como presidenta y vicepresidenta de la compañía. Ambas hermanas desarrollaron su carrera en diferentes departamentos de Sociedad Textil Lonia, antes de embarcarse en la compañía en 2005.

 

El órgano administrativo de Bimba y Lola está compuesto además por tres consejeros independientes: José María Castellano Ríos, vicepresidente y consejero delegado del grupo Inditex de 1997 a 2005; Sylvie Colin, con experiencia en empresas como Kenzo, donde ocupó el cargo de consejera delegada, y Cristina Trujillo Parra, que ha trabajado de la mano de empresas como Desigual.

 

Jesús Domínguez Fernández, confundador tanto de Bimba y Lola como de Adolfo Domínguez, y Fernando Domínguez como consejeros dominicales, y Eva Hernando, como secretaria del consejo, completan la cúpula de la compañía.