Holanda abre la veda: Ómicron amenaza con otra Navidad de mínimos
El cierre de todo el comercio en Países Bajos hasta el 10 de enero anticipa una oleada de restricciones en Europa en el momento clave del año: el Black Friday y Navidad concentran el 30% de las ventas.
20 dic 2021 - 05:00
Las fichas del dominó han comenzado a caer de nuevo. El sábado, el Gobierno de Países Bajos anunció un nuevo confinamiento estricto, incluyendo el cierre de todo el comercio no esencial, hasta el próximo 10 de enero, abriendo la veda a una nueva oleada de restricciones en toda Europa y despertando el temor en el sector a enfrentarse, de nuevo, a una Navidad descafeinada justo cuando más la necesitaba.
La campaña de Navidad y el Black Friday (que este año ha sido mucho menos boyante que en ejercicios anteriores) concentran el 30% de las ventas del sector en todo el ejercicio, un porcentaje que en 2021 sería probablemente mayor tras las restricciones de principios de año.
Más allá de Holanda, las medidas se centran por ahora en los no vacunados y en los viajeros, especialmente aquellos procedentes de zonas con altas tasas de prevalencia de la variante Ómicron, pero algunos gobernantes han dado ya mensajes que anticipan nuevas medidas.
Navidad y el Black Friday concentran alrededor del 30% de las ventas del sector en todo el año
En Alemania, por ejemplo, el nuevo ministro de Salud, Karl Lauterbach, afirmó que Ómicron provocará una “masiva quinta ola” de la pandemia, y advirtió que el país tiene que prepararse para una situación “nunca antes vista”. En Reino Unido, donde los contagios se duplican cada entre dos y tres días, el Gobierno impuso una batería de medidas a principios de mes que incluyen la obligatoriedad del teletrabajo.
En España, grandes empresas como CaixaBank, Telefónica, Santander o Iberdrola también han aumentado las medidas para evitar los contagios, entre ellas la cancelación de eventos como cenas de Navidad. La falta de eventos sociales y el teletrabajo han sido, en las sucesivas olas, un golpe particularmente duro para la moda.
Aunque la mayoría de nuevas medidas se concentran en países donde la tasa de vacunación es menor a la española, y por tanto el riesgo de que aumente la presión hospitalaria es mayor, todo apunta que las restricciones también llegarán a España.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, compareció ayer para comunicar que el próximo miércoles, 48 horas antes de Nochebuena, se convocará la Conferencia de Presidentes autonómicos, en la que se estudiarán nuevas medidas.
En España, la Conferencia de Presidentes se reunirá el miércoles, a 48 horas de Nochebuena
Las nuevas restricciones truncan una anticipadísima campaña para el sector, que esperaba este último estímulo para tratar de salvar un año que no ha sido tan bueno como se esperaba. Las restricciones de la primera mitad del ejercicio, coincidiendo con las sucesivas olas del Covid-19, han dejado un salvo negativo de ventas incluso comparado con 2020.
En el conjunto de la Unión Europea, el comercio de moda ha cerrado cada mes a la baja respecto a 2020, exceptuando aquellos donde la base comparable era mínima. En agosto, las ventas se contrajeron un 5,4% y en septiembre, un 3%, según los últimos datos de la agencia estadística Eurostat.
En España, las ventas apenas han comenzado a remontar. Después de 23 meses a la baja, la facturación del comercio de ropa y complementos repuntó en septiembre, con un alza del 8% respecto a 2020, y en octubre subió otro 6,3%, aunque el acumulado anual continúa siendo negativo.
En el caso improbable que no hubiera más restricciones al comercio en el continente, las medidas que se están imponiendo privarán al sector de otro de sus clientes estrella: el turista. Portugal, Grecia e Irlanda piden ya un PCR negativo a todos los viajeros, independientemente de su estado de vacunación, y Francia, que ya lo exigía a los turistas extracomunitarios, prohíbe desde el pasado sábado los viajes no esenciales procedentes de Reino Unido.
Alemania también ha aumentado las restricciones a los turistas británicos, a los que ahora impone una cuarentena obligatoria de catorce días, debido al avance de la variante Ómicron en el país. Francia y Dinamarca también son consideradas de alto riesgo.