Industria y calzado moldean la campaña electoral de Fuensalida para el 28 de marzo
La localidad toledana, conocida como la Alemania chica, conserva grandes compañías del sector como Pablosky, que todavía siguen produciendo desde una de las ciudades del calzado de España.
25 may 2023 - 05:00
n Fuensalida se encuentra otra de las grandes ciudades del calzado de España. Al norte de la provincia de Toledo, a uno hora de distancia de Madrid, se ubica el municipio sede de Pablosky, Kangaroos o Tolino y, a pocos metros de él, está Portillo de Toledo, donde se levanta Joma. Lo globalización pasó factura a Fuensalida, que en la década de los ochenta llegó a contar con 130 fábricas de calzado, pero los grandes nombres supieron mantenerse y a día de hoy sigue siendo un pilar económico para la región.
La actividad fabril de Fuensalida se remonta a los talleres de alpargatas y las albarcas realizadas con suelas de neumáticos gastados de camiones, una tradición industrial que le valió el sobrenombre de la Alemania chica del calzado. Desde 2017, la población ha ido ganando habitantes a cuentagotas y, en 2019, último año del que hay datos, sumaba 11.655 habitantes, y una renta per cápita de 21.186 euros, por debajo de los 29.581 euros que registró el conjunto de España un año antes de la pandemia.
En sus décadas de apogeo, el calzado de Fuensalida fletaba autobuses a otros pueblos de la provincia para traer trabajadores, que solían llevarse el trabajo a casa para sacarse un sobresueldo. Actualmente, todavía es habitual la existencia de profesionales que siguen trabajando desde casa como autónomos para varias compañías de la región.
Pablosky, que surgió de una cooperativa después de que Juan Pablo Martín comprara el resto de las participaciones, todavía conserva el total de su producción en la localidad. También se encuentra en el municipio el centro tecnológico de la Asociación de Investigación y Desarrollo del Calzado y Afines de Toledo (Adiscat), en el que están inscritos compañías como Pablosky, Baerchi o Joma.
La actividad fabril de Fuensalida se remonta a los talleres de alpargatas y las albarcas realizadas con suelas de neumáticos gastados de camiones
Al frente del Ayuntamiento se encuentra Santiago Vera, el primer alcalde del Partido Socialista Obrero Español (Psoe) de Fuensalida, que se impuso al Partido Popular por un escaño tras obtener ocho concejales en las elecciones de 2019, destronando al alcalde, Jaime Alonso. Los otros grupos con representación en el municipio son Ciudadanos y Vox, cada uno con un escaño.
Tras los cuatro primeros años de mandato en el municipio, el partido socialista ha señalado la variante de la carretera que desviará el tráfico pesado rodeando el municipio que se empezará a construir el próximo mes será el despegue del polígono industrial del municipio. Además, entre las promesas del candidato se encuentra un pacto para proteger el sector del calzado, “una seña de identidad de Fuensalida”, destaca.
Alonso, candidato un año más del Partido Popular para el pueblo, asegura que su objetivo es “volver a ser el motor industrial de la comarca”. El antiguo alcalde señala que buscará que el polígono industrial del municipio vuelva a recibir empresas “para que los jóvenes se puedan quedar”, por lo que aportará ventajas fiscales a las compañías que quieran asentarse en el municipio.