Blanco, con las tiendas vacías: la aduana retiene la mercancía por impago

Blanco sigue encadenando dificultades. Mientras sus comercios se resisten al cierre por el impago del alquiler, empiezan también a sufrir la falta de género. Esta última vuelta de tuerca a la compleja situación de la compañía se produce un día después de que se conociera que el fondo saudí AC Modus sondea diferentes opciones para captar recursos e incluso baraja su liquidación.

Ahora, las tiendas empiezan a estar desabastecidas porque la nueva colección está retenida en la aduana por las deudas de la cadena de moda con los proveedores, según Economía Digital. Se calcula que los proveedores de Blanco enviaron el pasado julio unas 2.000 cajas con ropa de la nueva colección que todavía no se han distribuido.

Fuentes sindicales han señalado que la dirección de la empresa “ha informado a los trabajadores de su renuncia expresa a financiar esta línea de negocio”. La compañía no ha querido realizar declaraciones al respecto. Los trabajadores de la empresa aseguran que, de lograr un acuerdo, la empresa se verá abocada a “la liquidación en dos semanas”. 

La empresa se ha visto afectada por los numerosos cambios en el equipo directivo durante el último año. Los propietarios de la empresa se encuentran actualmente estudiando diferentes vías para evitar el impacto en el negocio global de las pérdidas de España y Portugal. 

A la espera de que se depositen en el Registro Mercantil las cuentas de la sociedad Global Leiva (con la que opera Blanco) correspondientes en 2015, la cadena española finalizó 2014 con una caída en sus ventas del 36,7%, hasta 107,6 millones de euros, una de las razones que llevaron a Alhokair a desinvertir en Blanco. Según las cuentas del grupo saudí, Blanco finalizó el ejercicio 2014 con unos números rojos de 32 millones de riyales saudíes (7,9 millones de euros).