Puig sigue remodelando la cúpula de Nina Ricci: los directores creativos dejan la marca

Más cambios en la cúpula de Nina Ricci. Rushemy Botter y Lissi Herrebrugh, directores creativos de la firma, abandonarán su puesto tras más de tres años al frente del equipo de diseño de la compañía, propiedad del grupo catalán Puig.

Rushemy Botter y Lissi Herrebrugh se incorporaron a la dirección creativa de Nina Riccien agosto de 2018 como parte de una estrategia de Puig para modernizar la imagen de la firma. Los diseñadores han señalado que la decisión de abandonar su puesto ha sido tomada en consenso con la compañía.

“Estamos planeando una nueva dirección creativa e innovadora para Nina Ricci”, ha apuntado la empresa. Los diseñadores, originarios de Países Bajos, continuarán su trayectoria en moda al frente de su compañía Botter, que fundaron en Bélgica en 2017.

Este movimiento se produce poco después de que Puig remodelara la cúpula de Nina Ricci con la salida de su directora general. El pasado septiembre, Charlotte Tassen, abandonó la dirección de la compañía después de tres años al frente.

Nina Ricci ha señalado que está en búsqueda de una nueva dirección creativa “innovadora”

La empresa se encuentra en un proceso de remodelación después de que en abril de 2021 echara el cierre de su histórico flagship store en París, que había abierto en 1979, con la intención de volcarse en el canal digital. Entonces, la compañía también abrió una nueva plataforma de venta online.

El plan estratégico de Puig para Nina Ricci pasa por reposicionar la firma en la categoría de lujo accesible. En la colección de otoño 2021 de la marca, el número de prendas se redujo en un 30% y los precios se recortaron un 20%.

La compañía, fundada en 1932, lanzó su primer perfume con Puig en 1948, L’Air du Temps, que continúa siendo uno de sus bestsellers. En 1998, el grupo tomó el control del negocio de perfumería y moda de la marca.

Puig cerró el ejercicio 2020 con una facturación de 1.500 millones de euros, frente a los 2.029 millones de euros del año anterior. La empresa prevé repuntar en 2021, recuperando la barrera de los 2.000 millones de euros, y planea facturar 3.000 millones en ventas en 2023 y superar los 4.000 millones en 2025.