Trussardi abre nueva etapa: amplía capital, unifica líneas y baja precios para alcanzar 250 millones en 2020

Trussardi sienta las bases de una nueva etapa. La compañía italiana proyecta una ampliación de capital, unificará sus líneas y se reforzará en el segmento del lujo accesible para impulsar sus ventas hasta 250 millones de euros en cuatro años.

La transformación estará capitaneada por Tomaso Trussardi, miembro de la cuarta generación de la empresa y hoy su consejero delegado. El ejecutivo controla en la actualidad el 50% del grupo, después de comprar un 25% a su hermana Beatrice Trussardi.

Su madre, Maria Luisa Trussardi, es propietaria de otro 25%, y otro cuarto de la compañía está en manos de su hermana Gaia, la directora creativa de la compañía. Para la primera mitad de este año, el grupo proyecta una ampliación de capital de quince millones de euros. Por el momento, la opción de dar entrada a un nuevo socio en la compañía no está sobre la mesa, según explicó Tomaso Trussardi a WWD.

“No hay ofertas sobre la mesa y no estoy buscando socios”, explicó. Aun así, el directivo no descarta una salida a bolsa a medio plazo. “Quizás en tres o cuatro años, cuando estemos listos en términos de refinanciación e imagen; no estamos listos todavía y el mercado no está preparado tampoco, sería un movimiento especulativo”, añadió.

Uno de los ejes de la nueva estrategia de Trussardi es posicionarse en el segmento del lujo accesible, reforzando las líneas de accesorios. Como parte de este reposicionamiento, los accesorios, que facturan 23 millones de euros cada temporada, bajarán de precio hasta los 300 euros por un bolso de mano hasta los 600 euros por un bolso.

El hombre continúa siendo una parte clave en el negocio del grupo, copando entorno al 47% de las ventas. En China, el porcentaje asciende al 70%. Los trajes de Trussardi, que antes empezaban en 1.500 euros, podrán adquirirse ahora a partir de 350 euros. La gama alta comenzará en 800 euros.

Además, el consejero delegado de la compañía ha anunciado que unificará todas las líneas del grupo ya que “es contraproducente tener tres líneas”. Como resultado Tru Trussardi se integrará con la marca principal a partir de la colección de primavera.

Por último, Trussardi ha comenzado a reducir su red de distribución hasta 1.500 puntos de venta multimarca, eliminando las tiendas más pequeñas. “El pedido mínimo ahora es de 20.000 euros”, explicó Trussardi. En cuanto a sus tiendas propias, la compañía comenzará a reformar los establecimientos a partir de mediados de año en sus mercados principales (Europa y China), cerrará algunos y reubicará otros.  La compañía proyecta nuevas aperturas a partir de 2018.

Fundada en 1970 por Nicola Trussardi, la compañía cerró su último ejercicio con una facturación de 150 millones de euros y unas pérdidas de 6,9 millones de euros.