Sybilla abre las puertas de un ‘pop up’ en Madrid y regresa con una segunda colección

Sybilla regresa al mercado con una tienda efímera. La firma de moda, cuya marca y archivos fueron rescatados en marzo de 2023 a través de la sociedad Tauro Alonso, hoy ha abierto las puertas de su pop up store ubicada en el número 9 de la calle Noviciado de Madrid. La tienda efímera estará abierta hasta el 28 de febrero. 

El pasado junio, la marca de moda inició un nuevo plan de desarrollo que pasaba por un road show de tiendas efímeras. Tras esta apertura, la firma prevé llevar el concepto también a ciudades como Mallorca e Ibiza. Además, Sybilla prevé saltar el charco a México y Miami recuperando así una de las principales vías de expansión que tomó la marca en sus inicios. Sybilla también ha regresado con la presentación de su segunda colección prêt-à-porter para este otoño-invierno. 

Después de cuatro años tras su liquidación, la marca y sus archivos pasaron a manos de un empresario chileno a través de la firma de la sociedad Tauro Alonso, de nueva creación. A pesar de que la marca nunca ha dejado de estar activa en Japón, donde opera de la mano del grupo Itokin, el resto del negocio se gestionaba a través de la sociedad Programas Exteriores, que fue a liquidación en 2019.

Sybilla mantendrá abierta la tienda efímera hasta febrero de 2025

La diseñadora, que llegó a ser encumbrada como heredera de Balenciaga por parte de la crítica internacional, abrió su taller de ropa a medida en Madrid en 1983, cuando presentó su primera colección. Dos años después, la diseñadora empezó la comercialización de sus colecciones tras desfilar en el Salón Gaudí de Barcelona y, a finales de los ochenta, comenzó a trabajar con el grupo industrial italiano Gibó, que se encargó de la producción y distribución de sus prendas.

Con el apoyo del grupo transalpino, Sybilla presentó sus colecciones en Milán, París, Nueva York y Tokio. La diseñadora empezó también a diversificar y lanzó colecciones de calzado, bolsos, prendas de punto y ropa de cama. En 1989 abrió tienda en Tokio y se expandió a través de corners en grandes almacenes en el país, el único donde la firma nunca ha dejado de operar. 

En los noventa, la creadora inició su etapa de retiro en Mallorca, aunque continuó con el negocio de licencias e impulsó la línea joven Jocomomola, la de hogar Sybilla Casa y la moda nupcial y fiesta Sybilla Noche. En 2003, la creadora dio entrada en la sociedad Programas Exteriores, que controlaba las marcas Sybilla y Jocomomola, a Martín Varsavsky y Miguel Salís, los fundadores de Jazztel, pero sólo seis años después la sociedad presentó concurso de acreedores.