El juez admite a trámite el concurso de Caramelo
17 abr 2013 - 19:36
Caramelo entra oficialmente en concurso de acreedores. El Juzgado Mercantil número 2 de A Coruña ha admitido hoy el expediente concursal de la compañía controlada por el empresario Manuel Jove a través de Inveravante. Los administradores serán el abogado Antonio Zamorano y un representante que debe designar BBVA, acreedor de Caramelo.
El juzgado, cuyo titular es Rafael García Pérez, ha declarado de forma conjunta el concurso voluntario de acreedores de las empresas Caramelo SAU y Caramelo Gestión SL, que se tramitará "como un concurso ordinario de especial trascendencia".
Las deudoras conservan las facultades de administración y disposición de su patrimonio, aunque este ejercicio queda sometido a la intervención de la administración concursal que debe autorizar o dar conformidad a las decisiones.
Caramelo ha justificado la presentación del concurso de acreedores por “la extrema situación que atraviesa” y asegura que la “única fórmula para conseguir la viabilidad, es a través de un profundo redimensionamiento que le permita garantizar su futuro”.
La compañía, que asegura que su voluntad es la viabilidad, presentará también un expediente de regulación de empleo (ERE). Según los últimos datos disponibles, Caramelo contaba a principios de 2012 con una plantilla de 480 empleados.
Caramelo, que ha cerrado 2012 con unas pérdidas operativas de quince millones de euros, puso en marcha el año pasado un plan reestructuración de áreas como diseño, compras, procesos productivos, ventas e internacionalización.
A finales del pasado octubre, Caramelo incorporó a Enrique Fernández del Riego, ex director general de Marks & Spencer en España, como director general, en sustitución de Carlos Fernández Couto.
La empresa pone en marcha ahora un proceso para abrir su capital y conseguir un socio que garantice su viabilidad. Fuentes de la compañía han asegurado que aún no hay negociaciones en marcha. Además de Inveravante, que controla el 92,5% de Caramelo, el capital de la empresa también está en manos de la Xunta de Galicia.