Empresa

Blanco prepara el cierre en Paseo de Gracia de Barcelona mientras negocia con sus acreedores

C. Pareja/ P. Riaño

3 jun 2013 - 04:53

Otra tienda insignia de la cadena de moda Blanco se prepara para cerrar sus puertas. Tras bajar la persiana en la calle Preciados de Madrid, Blanco pone en marcha la cuenta atrás para el cierre de su establecimiento de Paseo de Gracia de Barcelona. Según han explicado a Modaes.es fuentes de la empresa, que se encuentra en preconcurso de acreedores, la tienda cerrará la próxima semana. En el último año, la compañía ha prescindido de una veintena de establecimientos en España.

 

Blanco se instaló en el número 27 de Paseo de Gracia en 2009, protagonizando una operación de precios récord. El edificio cuenta con otro inquilino en sus dos locales comerciales: la cadena de moda Cos, propiedad de H&M. Ambos locales, propiedad de Porcelanosa, cuentan con alrededor de 850 metros cuadrados de superficie.

 

El establecimiento de Blanco cerrará sus puertas durante la próxima semana. A finales de abril, la empresa echó el cierre a otro de sus establecimientos de referencia, ubicado en la calle Preciados de Madrid.

 

La compañía de capital familiar está acometiendo un proceso de reestructuración de su red de tiendas internacional para reducir costes. Fuentes del sector inmobiliario señalan que actualmente todos los locales de la cadena “están en el mercado” por impago de sus alquileres.

 

La empresa, que no realiza declaraciones respecto a su evolución en los últimos meses, cuenta actualmente con 164 establecimientos en España, según consta en su página web. En el directorio de la empresa actualizado a 28 de marzo constaban veinte establecimientos más. Blanco ha echado el cierre a sus tiendas en Reino Unido, mientras sigue operando, por ejemplo, en Francia y Grecia.

 

Concurso de acreedores

 La compañía solicitó a principios de marzo preconcurso de acreedores para cuatro de sus sociedades. Avance y DiseñoDiagomodaTiendas Blanco España Blanco Moda Internacional cuentan desde entonces con un máximo de cuatro meses para llegar a un acuerdo con sus acreedores. 

 

Tras haber intentado buscar un inversor para acelerar su desarrollo internacional y esquivar la caída de ventas que la compañía estaba sufriendo en España, Blanco, liderada en la actualidad por Bernardo Blanco Morenoinició negociaciones con el grupo catalán Mango, que finalmente se rompieron.

 

En paralelo a la negociación con los acreedores amparada por el artículo 5 bis de la Ley Concursal, Blanco sigue buscando socios para conseguir liquidez. Entre las empresas que ha tanteado figuran grupos de retail basados en Oriente Medio.

 

Blanco también ha visto como su plantilla se reducía en un 10% por la desconfianza de sus empleados hacía el futuro de la empresa.  Muchos de los trabajadores del grupo se han acogido a la opción de abandonar la compañía con veinte días de indemnización por año trabajado por estar en desacuerdo con la modificación de sus condiciones laborales.

 

Los representantes sindicales interpusieron una demanda ante la Audiencia Nacional por la aplicación del artículo 41 de la última reforma laboral (que permite modificar los sistemas de remuneración y cuantía salarial que no estén expresamente recogidos en el convenio) por parte de la empresa, al considerar que su imposición no estaba justificada.

 

La empresa, que hasta ahora sumaba 2.000 trabajadores, continúa teniendo problemas con una gran parte de sus trabajadores por el retraso en el pago de las nóminas. La compañía registró en 2012 unas ventas cercanas a los 300 millones de euros.