Puma sella su entrada en Madrid con un ‘flagship’ en Fuencarral

Puma, a la caza del consumidor madrileño. La compañía alemana especializada en equipamiento deportivo sella su entrada en la capital con un establecimiento en calle Fuencarral.  Así, la compañía retoma su crecimiento en el país y se sumará al flagship store que la marca tiene en Paseo de Gracia, en Barcelona, y que abrió sus puertas en 2012.

El nuevo establecimiento de Puma, que abrirá el próximo año, estará ubicado en el número 33 de la calle Fuencarral, en un local ocupado hasta ahora por la firma vasca de moda femenina y masculina Skunkfunk. La operación ha sido intermediada por la consultora inmobiliaria CBRE.

Esta será la segunda tienda de Puma a precio completo en España. La primera abrió sus puertas el pasado 2012 en Barcelona, en el número 53 de Paseo de Gracia, en un local anteriormente por la compañía de calzado Timberland. Esta se convirtió en el primer establecimiento de Puma en España, donde la compañía completa su red de distribución con seis outlets repartidos por todo el país.

Puma vuelve a reactivar así su crecimiento en España tras recuperar el control de su marca en el país en 2010. Hasta entonces, la enseña estaba gestionada en el mercado español por el grupo alicantino Estudio 2000. La empresa, que fue condenada a pagar 98 millones de euros a Estudio 2000 en compensación (aunque la sentencia fue recurrida), inició entonces un plan de crecimiento en el mercado español.

Puma vuelve a reactivar su crecimiento en España tras recuperar el control de su marca en el país en 2010

Puma Sports Spain, la filial de Puma en España, tiene su sede en Cornellà de Llobregat (Barcelona) y está liderada por Javier Ortega, que se incorporó a la empresa procedente de Nike. El directivo fue el encargado de liderar el relanzamiento de Puma en España y trazó un plan filial mantuvo sus ventas estancadas en dicho año, al alcanzar una cifra de negocio en España de 50,4 millones de euros, frente a los 51,3 millones de euros del año anterior.

No obstante, la filial española del grupo ha conseguido reducir sus pérdidas en este mercado. Puma, que en 2014 registró unos números rojos de 3,2 millones de euros, está reconduciendo sus resultados en el país en 2015 y disminuyó sus pérdidas a 2,4 millones de euros. Los fondos propios de la sociedad se aumentaron un 2,5% el pasado año, situándose en 4 millones de euros.