Iniciativa privada y escasa financiación pública: cómo se protege la artesanía

El encaje de Camariñas, las jarapas de la Alpujarra o el bordado de Lagartera son sólo algunos ejemplos de la gran tradición artesana en territorio español. En este Insight, patrocinado por Tous, Modaes repasa las claves del sector artesano en el país, sus retos y operadores clave y sus oportunidades a futuro.

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El sector de la artesanía acusa generalmente una falta de apoyo público en el mercado español. Las subvenciones se suman a cuentagotas y son de importes modestos, pero sí hay un creciente impulso privado que desarrolla iniciativas con la vocación de reivindicar y proteger la artesanía.

Las iniciativas de las comunidades autónomas están enfocadas principalmente a promover la participación de las empresas en ferias artesanales o estrategias para renovar o digitalizar los negocios.

En algunas autonomías, las subvenciones pueden llegar hasta los catorce millones de euros, aunque las ayudas bases suelen variar entre 2.000 euros y 5.000 para la participación en ferias, 2.500 euros y 10.000 euros para paliar los efectos de la pandemia, o la cobertura de entre el 50% y el 75% del presupuesto de los planes para modernizar y acondicionar los talleres.

Algunas comunidades también ponen en marcha ferias y eventos artesanales, así como la creación de escuelas de alta artesanía y asociaciones apoyadas por los organismos públicos para el fomento del sector y la lucha por promocionar su imagen. Las etiquetas de denominación o el reconocimiento de zonas de interés artesanal son otras de las iniciativas de la Administración para promover el sector.

Sin embargo, la mayor parte del impulso viene de la iniciativa privada, liderada por asociaciones como el Círculo Fortuny, la Asociación de Artesanos Contemporáneos o la Asociación Creadores de Moda de España, que en 2020 impulsó la Fundación Academia de la Moda Española para “preservar el saber hacer artesano”.

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Planes internacionales

A escala internacional, algunas instituciones y asociaciones han puesto en marcha medidas para darle un impulso al sector. Uno de los casos es el de la Unión Europea, que promueve la artesanía mediante el proyecto Cre@tive, un programa que busca fomentar el turismo mediante el apoyo al sector creativo y apoyar así la herencia europea y promocionar la cooperación entre empresas.

El organismo también estableció una protección de productos artesanales con el objetivo de proteger y regular este tipo de artículos que cumplan las características reconocidas por la Unión Europea. Esta iniciativa se traduce en que los productos hechos en las regiones reconocidas por la Comisión y producidos por métodos particulares, podrán tener su propia denominación. Es el caso del cristal de Murano, en Italia.

El objetivo de esta medida es potenciar el desarrollo de las regiones rurales, facilitar a los consumidores la identificación de los productos que tienen calidad, poner en valor el sector y ayudar en la promoción de los oficios artesanos.

La Alianza Europea de Industrias Creativas y Culturales (Eccia), una organización compuesta a su vez por las principales asociaciones de lujo

A escala internacional existe la Alianza Europea de Industrias Creativas y Culturales (Eccia), una organización compuesta a su vez por las principales asociaciones de alta gama, entre las que se encuentran la española Círculo Fortuny, la francesa Comité Colbert, la italiana Altagamma, la alemana Meisterkreis y la británica Walpole.

La organización representa a cerca de cuatrocientas empresas que emplean a 1,7 millones de personas y actúa como embajadora de los intereses del sector a escala europea. Entre sus prioridades se encuentran fomentar la creatividad y el know how y poner en valor el oficio de artesano para evitar su desaparición.

También a escala europea se encuentra el World Crafts Council Europe, establecido en 1964 para promover el interés internacional por la artesanía y fomentar el contacto entre los artesanos de diferentes países. En 2019, la organización puso en marcha el proyecto Crafting Europe para fortalecer al sector en toda Europa.

En su plan de acción, el proyecto recoge los siguientes puntos: apoyar medidas para impulsar la creación de empresas artesanas, asegurar la inclusión del sector con programas de apoyo, realizar estudios para identificar el valor económico, educativo, cultural y social de la artesanía Europa, abordar la mengua de la oferta formativa, crear un año europeo de la artesanía y promover el reconocimiento y la protección del sector a través de legislación.