“Mi anillo mide cuánto duermo”: los complementos inteligentes suman nuevos ‘players’

¿Se imagina que su anillo le calcule su ritmo cardíaco? ¿O que una pulsera contabilice los pasos que realiza a diario? Innovar en moda ya no es únicamente crear nuevos modelos de negocio, nuevos canales de distribución o apostar por modelos creados a base de Inteligencia Artificial (IA), sino hacer anillos casi tan inteligentes como un teléfono móvil. Estos dispositivos se equipan con tecnología NFC y ofrecen un abanico de funcionalidades que se controlan desde el teléfono móvil.

Algunos de los players que dominan el mercado son la empresa finlandesa Oura o la estadounidense Whoop, así como grandes operadores de telefonía móvil como Xiaomi. Con productos que oscilan en una horquilla de precios desde los 25 euros hasta los 450 euros. Samsung ahora se suma como un nuevo competidor en la liga de los weareables.

Oura es una de las empresas pioneras en el sector y actualmente ha dado el salto al retail y empezará a vender, por primera vez, en tiendas físicas. Hasta ahora, su comercialización ha sido, principalmente, a través del canal online, hasta que los puntos de venta de la cadena estadounidense Target han empezado a distribuir el kit para probar cuál es el tallaje del anillo.

La empresa finlandesa se fundó en 2013 y tres años después introdujo su primera generación de anillos. La horquilla de precios de los anillos oscila entre 329 euros y 399 euros, además de la suscripció mensual de 5,99 euros para acceder a los análisis de salud, sueño o frecuencia cardíaca, entre otras informaciones. Entre las funciones de los anillos inteligentes de Oura está la función impulsada por IA, que permite a los usuarios obtener recomendaciones de chatbots sobre su salud y estilo de vida.

Además de complementos, los anillos miden parámetros como el sueño o la frecuencia cardíaca

Esta no es la única compañía que está inmersa en la fiebre de los complementos inteligentes. La empresa tecnológica Whoop, de la que son accionistas deportistas como Cristiano Ronaldo, Kevin Durant o Michael Phelps, es la creadora de una pulsera que recoge los parámetros físicos de los deportistas, desde la temperatura corporal o las alteraciones cardíacas, hasta la frecuencia respiratoria. La empresa fue fundada en 2012 de la mano del estudiante Will Ahmed y, como Oura, Whoop también requiere de una suscripción mensual para permitir a los usuarios conversar con el programa y tener conversiones sobre su salud y entrenamiento.

El grupo chino Samsung también se ha querido subir a la ola y ha lanzado al mercado su primer anillo inteligente. El anillo, que está disponible en varios colores y tamaños, tiene un precio de 449 euros y ya está disponible en Europa, sin embargo, aún no ha aterrizado en España.

Las grandes compañías de tecnología como la empresa china Xiaomi o la estadounidense Apple llevan cerca de diez años innovando en los weareables. El Apple Watch se lanzó al mercado en 2014 y pasó a ser una invención revolucionaria. Con los años, ambas compañías han presentado otros complementos tecnológicos como gafas y nuevas generaciones de relojes inteligentes, entre otros.

La moda tampoco quedó atrás y junto con el lanzamiento al mercado de los accesorios inteligentes, Ralph Lauren fue una de las compañías pioneras en sumarse a la fiebre tecnológica con la creación de las línea Polo Tech, formada por camisetas con sensores capaces de recoger información biológica y psicológica de los usuarios.