Decathlon afronta el Covid en España recuperando rentabilidad por primera vez desde 2016

España será uno de los mercados más afectados por la crisis económica derivada del coronavirus y Decathlon, que tiene en el país el segundo mayor bastión de su negocio, afronta 2020 recuperando rentabilidad por primera vez desde 2016 pero con el menor ritmo de crecimiento de la última década. El gigante galo de la distribución de equipamiento deportivo aún no se ha recuperado del tropiezo en España de 2018: el grupo finalizó 2019 con una cifra de negocio de 1.708 millones de euros, todavía por debajo de la cifra de 2017.

Según las cuentas del ejercicio 2019, recientemente depositadas en el Registro Mercantil, Decathlon finalizó el último ejercicio en España con un crecimiento del 2,89%, desde los 1.660 millones de euros de 2018, cuando registró una caída del 3,04% y el propio grupo admitió que “no estuvo a la altura de las expectativas”, en palabras el director general de Decathlon España, Javier López.

En 2020, el negocio de Decathlon en España volverá a sufrir por el impacto en el consumo del Covid-19 y el cierre de tiendas por el estado de alarma, si bien el deporte es una de las categorías que mejor está resistiendo. Aunque la compañía reconoce que en el momento de elaboración de las cuentas de 2019 no es posible conocer el impacto exacto del Covid-19, la empresa incluye la pandemia entre los “riesgos e incertidumbres” que afectarán a su actividad.

“En los últimos años, el principal riesgo que asume la sociedad hace referencia a la evolución del consumo en España, que teniendo en cuenta las circunstancias excepcionales de la crisis sanitaria generada por el coronavirus, entendemos se verá afectada durante unos meses en el próximo año”, señala la empresa en la memoria del ejercicio.

Decathlon finalizó 2019 con una cifra de negocio de 1.708 millones de euros, todavía por debajo de la cifra de 2017

En 2019, el grupo también logró corregir la evolución de su resultado neto, con un aumento del 7,58% en el ejercicio 2019, hasta 104 millones de euros. Esta evolución contrasta con el desplome del 19,6% registrado en 2018, cuando el resultado neto del grupo cayó hasta 96,67 millones de euros, desde los 120,24 millones de euros de un año antes.

Pese a recuperar en 2019 el ritmo de crecimiento, Decathlon no ha logrado todavía recuperar el volumen de 2017, cuando registró una cifra de negocio de 1.712 millones de euros. Además, el alza del último ejercicio es el menor de la última década, muestra de la ralentización del consumo en el país ya antes del golpe del Covid-19 y de la madurez del modelo en España.

En el último ejercicio, la empresa sólo sumó una tienda más, hasta 171 puntos de venta en el país, tras llevar a cabo seis aperturas y tres reformas, de manera que reorganizó su red con cierres. El de 2019 es también el menor incremento en el saldo total de tiendas de la última década, tras haber llevado a cabo una inversión de 25,36 millones de euros en aperturas y reformas.

Otra de las muestras de la madurez del negocio de Decathlon en el mercado nacional es el ratio de facturación por tienda. A lo largo de los últimos años, esta cifra ha ido reduciéndose cada año, hasta situarse en 9,99 millones de euros por punto de venta en 2019, en línea con 2018. En 2015, por ejemplo, Decathlon registraba una facturación de 11,86 millones de euros por establecimiento.

Decathlon finalizó el ejercicio 2019 con una plantilla de 11.652 personas en el mercado español, frente a los 11.573 trabajadores de hace un año. Esta cifra incluye personas de oficinas, tienda, producción y los siete centros logísticos de la empresa en el país.