Frasers presenta una oferta no vinculante para adquirir Mulberry

Frasers se postula como posible comprador de Mulberry. El grupo británico, que ya cuenta con un 37% del capital de Mulberry, ha anunciado hoy una oferta de compra no vinculante para adquirir la totalidad de los bonos emitidos por Mulberry. La compañía británica, en el marco de la presentación de sus resultados anuales, comunicó el viernes su intención de poner a la venta bonos por valor de diez millones de libras (11,9 millones de euros) para afrontar su entrada en números rojos en el último ejercicio.

El grupo británico ha ofrecido un total de 130 peniques por cada una de las acciones a la venta de Mulberry, lo que valoraría la empresa en 83 millones de euros, un 30% más que el dólar por acción de la oferta inicial de Mulberry. “Como inversor comprometido a largo plazo, Frasers hubiera estado dispuesto a adquirir la totalidad de la emisión, potencialmente con mejores condiciones para la empresa”, ha denunciado Frasers en un comunicado.

El grupo ha criticado al minorista por no haber informado con el tiempo suficiente de sus planes, a la vez que ha hecho claras sus intenciones de “no aceptar una situación como la de Debenhams, en la que una empresa totalmente viable se vio obligada a declararse en quiebra”. El grupo de grandes almacenes entró en concurso de acreedores en 2019 tras las tensiones con su principal accionista, Sports Direct.

Frasers ha denunciado que no recibió la noticia de la emisión de bonos hasta poco antes del anuncio oficial

Mulberry había anunciado poco antes sus resultados para el ejercicio. La empresa cerró el ejercicio fiscal (finalizado el 30 de marzo) con una facturación de 152 millones de libras (182 millones de euros), hasta un 4% menos que en el año anterior. Durante el periodo, Mulberry ha entrado en números rojos, con pérdidas de 35 millones de libras (41,9 millones de euros), frente al beneficio de 11,4 millones de libras (13 millones de euros) del ejercicio previo.

Las ventas Mulberry se han desplomado en todos los mercados en los que opera, especialmente lastradas durante el primer semestre del ejercicio, cuando la facturación se redujo en un 12% interanual frente a los seis primeros meses del ejercicio anterior.

El grupo ha asegurado que Mulberry se enfrenta a grandes dificultades, como el aumento de costes, los shocks macroeconómicos y la mayor selectividad de su base de clientes. “Con nuestra experiencia y presencia líderes en el sector minorista y nuestra capacidad de distribución de primera clase, creemos que Frasers es el mejor administrador para que Mulberry vuelva a ser rentable”, ha asegurado el grupo.