La italiana Boggi va por más en México: planea hasta veinte tiendas en el país
La compañía desembarcó en el mercado mexicano este año y está presente también a través de concesiones en Uruguay y Perú. “Hay muchas conversaciones en marcha”, explica su consejero delegado.
1 oct 2019 - 00:00
Boggi quiere hacerse un hueco en los armarios de los hombres latinoamericanos. La compañía, nacida en Italia pero con sede en Suiza, aterrizó en México a principios de este año y contempla tejer una red de hasta veinte tiendas en el país, según ha explicado su consejero delegado, Paolo Selva, a Modaes.es.
La empresa, especializada en moda masculina, opera en el mercado azteca de la mano de Grupo Harber’s, con quien abrió el pasado abril sus dos primeras tiendas en el país. Boggi complementa su distribución en el país con presencia en El Palacio de Hierro.
En el resto de Latinoamérica, Boggi está presente con concesiones en mercados como Uruguay y Perú, y “hay muchas conversaciones en marcha” que podrían llevar la marca a nuevos mercados, según Selva.
Boggi desembarcó en México el pasado abril de la mano de Grupo Harber’s
Este plan en México forma parte de un proyecto de expansión más amplio con el que el grupo prevé alcanzar las 400 tiendas en dos años. La estrategia pasa por seguir creciendo en los países en los que ya está presente y aterrizar en nuevos mercados como República Checa, Polonia o China, donde prevé poner en marcha treinta tiendas de la mano de un socio regional.
Desde su nacimiento, Boggi siempre ha centrado el cien por cien de su distribución en el retail, la mayoría gestionado directamente. Actualmente, el grupo opera con 195 tiendas en 33 países, de las que sólo una décima parte es gestionada por terceros.
Boggi echó a andar en 1939 en Nápoles y, veinte años después, puso en marcha su primer flagship store en la plaza San Babila de la ciudad italiana. El grupo inició su internacionalización en 1996, cuando abrió su primera tienda en Ginebra (Suiza). Sin embargo, no fue hasta la década de los 2000 que la compañía dio un nuevo impulso con la apertura de nuevas tiendas en el extranjero y un reposicionamiento de la marca.
En 2002, el grupo milanés Fin.part se hizo con el 90% de la empresa por 8,65 millones de euros, mientras que Paolo Boggi, su fundador, conservó el 10% del capital. Sólo un año después, Boggi volvió a cambiar de manos y fue adquirida por los hermanos Carlo, Claudio y Roberto Zaccardi, miembros de la familia propietaria de los grandes almacenes italianos Brian&Barry. Aunque la empresa no comunica su cifra de negocio, varios medios italianos la estima en más de 200 millones de euros.