La producción textil cierra 2020 con una caída del 7,9% y la confección y el calzado se desploman
El Índice de Producción Industrial (IPI) del sector se disparó un 22,3% en diciembre, después de un año de vértigo. La confección y el calzado, en cambio, continuaron en descenso.
8 feb 2021 - 10:06
La producción de moda cierra un año marcado por la parálisis. Los tres subsectores de la industria han terminado 2020 a la baja, aunque con descensos muy diferentes según la categoría, según los datos hechos públicos hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Mientras el textil ha retrocedido un 7,9%, la confección se ha hundido un 26,5% y el cuero y el calzado, un 28,2%, caídas históricas en todos los casos. El IPI general, por su parte, se desplomó un 9,1%, la mayor caída en once años.
En diciembre, el IPI del textil se disparó un 22,3%, el mayor dato desde agosto de 2000. El sector pone así fin a un año que comenzó con descensos del 7,9% en enero y del 3,9% en febrero, que se aceleraron con la declaración del estado de alarma en marzo. Ese mes, la caída fue del 20,8%; en abril, fue del 53,4%, y en mayo, del 39,9%.
En junio, el sector comenzó ya a moderar la caída y en julio volvió a crecer, con un alza interanual del 3,2%. Desde entonces, la producción ha seguido creciendo mes a mes, con subidas máximas del 18,5% en agosto y del 10,2% en noviembre.
En cambio, ni la confección ni el cuero y el calzado han vuelto a remontar desde el golpe del Covid-19. La confección ha cerrado diciembre con un desplome del 19,3%, el mayor desde agosto, y el cuero y el calzado se hundió un 33,8% en el último mes del año, el mayor descenso desde mayo, cuando la actividad económica en España estaba todavía paralizada bajo el primer estado de alarma.
La confección sólo ha cerrado dos meses en ascenso (enero, con una subida del 8,1%, y septiembre, con un 3,2%), mientras que el calzado se ha mantenido en descenso durante todo el año.
Corregidos los efectos estacionales y de calendario, la tendencia se repite: la producción textil se impulsó un 14,6% en diciembre, mientras que la confección se hundió un 22,1% y el calzado, un 36,7%.
Por grupos más concretos de actividad, sólo cuatro cerraron en descenso. El mayor golpe lo registró la fabricación de calzado, con un batacazo del 42%, seguido de lejos por el curtido y la marroquinería, con un descenso del 20,4%; la confección, con un 19,1%, y el punto, con un 18,3%.
En cambio, las mayores subidas las anotaron la fabricación de tejidos textiles, que se disparó un 53,1%, por delante de la preparación e hilado de fibras textiles (9,5%) y el acabado de textiles (8,6%).
El IPI general, por su parte, se impulsó un 2,9% en diciembre, lo que supuso el primer avance tras once meses consecutivos a la baja. Con todo, corregidos los efectos estacionales y de calendario, la producción descendió un 0,6%.