Los precios del textil suben en marzo por primera vez desde el estallido del Covid-19

Los precios de la moda repuntan ligeramente cuando se cumple un año del estallido del Covid-19 en España. En marzo, el Índice de Precios Industriales (Ipri) del textil se incrementó un 0,5% interanual, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Se trata de la primera subida de precios desde febrero de 2020, justo antes de que la expansión de la pandemia motivara la declaración del estado de alarma en España en marzo.

Los precios del textil cerraron marzo de 2020 en plano, y comenzó después a encadenar descensos cada mes hasta septiembre y octubre, cuando el Ipri de nuevo se mantuvo sin variación. Desde entonces, se había continuado la tendencia deflacionista.

Los precios de la confección, en cambio, están ya al alza desde septiembre. En marzo, anotaron un leve repunte del 0,3%, en línea con el mes anterior. Los del cuero, por su parte, se incrementaron un 0,6%, dos décimas más que en febrero.

El Ipri general, por su parte, registró un repunte del 6,3%, rompiendo una racha deflacionista que se extiende desde antes del estallido del Covid-19. Se trata de la mayor subida de precios desde febrero de 2017.

Por destino económico de los bienes, todos los sectores industriales tuvieron una influencia positiva en la evolución de la tasa anual del Ipri general. El que más fue la energía, que aumentó su variación en casi 16 puntos, hasta el 12,2%, debido al aumento de precios de la producción, transporte y distribución de energía eléctrica y el refino de petróleo, frente a la bajada registrada en marzo del año anterior.

Dentro del sector de la moda, los grupos más inflacionistas fueron la confección de prendas de vestir de punto, con una subida del 2,9% (una décima menos que el año anterior) y el acabado de textiles, cuyos precios se incrementaron un 2,1% (frente al 3,5% de febrero).

El Ipri general registró un repunte del 6,3% en marzo

En cambio, la fabricación de tejidos textiles y la preparación, curtido y acabado de cuero y marroquinería fueron los dos únicos sectores deflacionistas del mes, con bajadas del 3,4% y del 1,1%, respectivamente.

La primera fue, de hecho, la que más contribuyó a la evolución de la tasa anual del Ipri general, ya que aumentó su variación en 2,5 puntos, aunque se mantuvo en tasas negativas. Le siguió la preparación e hilado de fibras textiles, que la incrementó en 0,5 puntos, hasta el 0,6%.

El Ipri es un indicador coyuntural que mide la evolución mensual de los precios de los productos industriales fabricados y vendidos en el mercado interior, en el primer paso de su comercialización, es decir, los precios de venta a salida de fábrica, excluyendo los gastos de transporte y comercialización y el IVA facturado.