Á. Badillo (Elcano): “Las empresas son imprescindible para combatir la desinformación”

Las decisiones se deben tomar con información veraz en la mano. Es una de las ideas que defendió ayer Ángel Badillo, investigador principal en lengua y cultura de Real Instituto Elcano, con motivo de la presentación de la plataforma Move! En el evento, celebrado ayer en el Museo del Traje (Madrid), el académico desglosó los principales retos que provoca la desinformación y numeró las claves para paliarla.

En un contexto de cambios legislativos en el sector, el investigador destacó la importancia de poder contar con la información “más fiable posible”. Para ello, Badillo realizó una radiografía histórica sobre la desinformación, que ubica en los orígenes de la sociedad.

Si bien la desinformación estuvo presente en la antigua Roma, en las guerras de religión en Europa o en los argumentos que llevaron al inicio de la segunda guerra de Irak, en los últimos años la tecnología ha maximizado su impacto. Desde 2016, los términos “noticias falsas” o “posverdad” empezaron a sonar con más fuerza y con las redes sociales la desinformación se ha disparado.

La creciente desconfianza de la sociedad con los medios de comunicación tradicionales (España es el país que menos confía en los medios) no ayuda a revertir esta situación. El estallido de la pandemia y el exceso de información son algunas de las razones que han motivado la desconexión con los medios, así como el general desinterés de las generaciones más jóvenes. Los conflictos internacionales, como la guerra en Ucrania o en Gaza, también puntúan en negativo.

Ángel Badillo ha señalado los motivos de la creciente desinformación, con la intención de que las empresas del sector los aborden

“Ahora el principal reto es frenar esta situación”, ha señalado el académico. Para ello, Elcano ha compuesto una guía (que estará pronto publicada) que permite a los ciudadanos conocer las principales claves para consumir información veraz. El objetivo de la institución es poder dar las herramientas necesarias a las empresas de todos los sectores para que tomen decisiones de manera estudiada.

Badillo dividió sus propuestas en cinco puntos, destacando que la Inteligencia Artificial no puede ser una herramienta en contra para los próximos años. “El principal desafío al que se enfrentan las compañías del sector es adaptar los marcos de la Unión Europea y para eso hacen falta los siguientes pasos”, destacó el ponente.  

En primer lugar, Badillo destacó la prevención y animó a las empresas a incluir procesos de formación específicos en los equipos, con el objetivo de que los datos que se difundan desde la empresa puedan ser “fácilmente contrastados”. La vigilancia y la detección serían las siguientes claves. “Los equipos de comunicación y ciberseguridad deben colaborar entre sí porque es muy complejo hacerlo sólo desde un departamento”, añadió.

Prevención, vigilancia, detección, respuesta y evaluación son los cincos pasos que deben seguir las empresas para combatir la desinformación, según Badillo

Siguiendo el eje del académico, los procesos de respuesta son otras de las características más importantes para las empresas interesadas en erradicar la desinformación, pues cualquier empresa debe solucionar rápido un problema de esta índole y comunicar a sus consumidores dónde ha estado el error.

El proceso culminaría, según palabras de Badillo, con una buena evaluación en la que las compañías se preguntan cómo ha ocurrido y trabajan para prevenir que el problema no tenga ocasión en el futuro. “Esta propuesta de cinco niveles debería combinar a muchos tipos de actores, entre las que se encuentran instituciones públicas y privadas; las empresas son imprescindible para combatir la desinformación”, concluyó el ponente.