Antonio Miró impulsa su línea femenina mientras negocia una segunda tienda en Barcelona

Antonio Miró se apoya en la mujer para afianzar su crecimiento. La compañía, propiedad de la familia Arquero (antiguos dueños de la licencia de Marithé+François Girbaud en España), ha creado por primera vez una colección completa dirigida a la mujer con el propósito de continuar extendiéndola en las próximas temporadas. Por otro lado, la empresa negocia la apertura de su segunda tienda en Barcelona.

La colección femenina es una de las palancas de crecimiento de Antonio Miró para 2019, junto con la línea infantil que lanzó el pasado otoño y la puesta en marcha de su ecommerce. Con estos tres pilares, el grupo quiere compensar la pérdida de Tendam (antes Grupo Cortefiel) como licenciatario de su línea Antonio Miró Studio, que se encuentra ahora en stand by.

Hasta ahora, las prendas para mujer representaban el 10% del conjunto de la colección de Antonio Miró y se ceñían a básicos. Para el próximo verano, esta categoría se ha ampliado hasta suponer el 30% del total, extendiéndose a más piezas de temporada.

Antonio Miró ha incrementado el peso de la mujer en su colección con miras a continuar apostando por este mercado

“Se hace más hombre porque es la categoría con la que se conoce Antonio Miró, pero iremos ampliando la línea de mujer”, ha explicado Andrea Arquero, al frente de la empresa, a Modaes.es. Según la empresaria, toda colección continúa estando diseñada por su director creativo, Albert Villagrasa.

Por otro lado, la compañía está en negociaciones con Value Retail para abrir un punto de venta en La Roca Village. El nuevo establecimiento se pondría en marcha en la ampliación del recinto comercial, cuyas obras ya están en marcha, según ha apuntado Arquero.

Esta sería la segunda tienda de Antonio Miró en Barcelona, después de abrir hace cuatro años su actual punto de venta en la calle Enric Granados, en la capital catalana. Los planes de la empresa pasan por concentrar su distribución en sus propios establecimientos físicos y online y apoyarse en las redes comerciales de sus licenciatarios.

La compañía negocia con La Roca Village la apertura de un establecimiento en la próxima ampliación del recinto

Con una trayectoria profesional de más de cuatro décadas, Antonio Miró llegó a ser uno de los diseñadores españoles con mayor reconocimiento en el extranjero y uno de los pilares de la moda española en las décadas de los ochenta y los noventa. A principios de los 2000, con el ánimo de impulsar el negocio y mantenerse en un segundo plano, el creativo catalán decidió abrir el capital de la compañía.

Tendam (antiguo grupo Cortefiel), propietaria de la licencia de Antonio Miró Studio, fue uno de los interesados, aunque finalmente el diseñador vendió el 70% de la empresa a la sociedad Nuevos Valores Textiles, controlada entonces por las familias Nassia y Arquero. Más adelante, la familia Nassia salió del capital. Esta última etapa ha estado pilotada por la empresaria Andrea Arquero.

La empresa continúa centrando su actividad en la explotación de diferentes licencias comerciales, desde artículos vinculados al negocio de la moda a otros sectores, como urnas funerarias, iluminación o grifería. La compañía genera un negocio de en torno a los treinta millones de euros a través de las licencias. No obstante, la facturación de la compañía en royalties se sitúa alrededor de unos 400.000 euros.