Empresa

Cambio de ruta en Vía Emilia: la distribuidora de los Malatesta se divide en dos

Francesca Malatesta y Jordi García Mercader han creado Via Global Fashion House y Claudia Malatesta y Orlando Martínez operarán con Via New Fashion.

Iria P. Gestal

20 jul 2020 - 05:00

Vía Emilia se divide en dos. La familia Malatesta, que fue socia de Max Mara en España y fundadora de la distribuidora, se ha separado y ha pasado a operar con dos sociedades independientes: Via Global Fashion House, controlada por Francesca Malatesta y su marido, Jordi García Mercader, y Via New Fashion, pilotada por Claudia Malatesta y Orlando Martínez.

 

La sociedad Vía Emilia, que en los últimos meses ha perdido firmas como Liu Jo, no se ha liquidado, pero el grueso de la actividad se ha trasladado a estas dos nuevas compañías. Otras como Elena Mirò continúan trabajando con la empresa. 

 

 

 

 

Via New Fashion gestiona las marcas del grupo italiano Imperial: Imperial y Please. Según explican desde la compañía, el objetivo es “ser el showroom de referencia del fast fashion italiano en España”, con un modelo flexible para los multimarca, con compras mínimas “sin tener que cargar con un volumen excesivo de stock”.  La empresa tiene su sede en Barcelona y oficinas en Madrid.

 

Via Fashion House, por su parte, gestionará las marcas premium que hasta ahora llevaba Via Emilia, como Karl Lagerfeld, Kate Spade Furla o High, entre otras. La compañía ha firmado además un acuerdo con la compañía estadounidense de inteligencia artificial XGen para impulsar su expansión en el mercado español.

 

 

 

 

La empresa tiene sede en Barcelona y cuenta con un showroom en Madrid, donde se encuentra además la sede de la agencia de comunicación Via Comunicación, impulsada por García Mercader y que da servicio a las marcas del grupo.

 

Además de los acuerdos de distribución, el resto de activos de Vía Emilia también se han repartido: cada nueva empresa se ha quedado con una de las naves del grupo en Barcelona y el equipo se ha trasladado según la marca para la que trabajaban.

 

La reorganización lleva gestándose un año y el objetivo, según Jordi García Mercader, se debe a la necesidad de “gestionar de forma independiente dos negocios muy distintos: el pronto moda y la moda premium”. 

 

Según los últimos datos disponibles, Via Emilia cerró 2018 con una facturación de 1,5 millones de euros, frente a los 2,2 millones del año anterior. La sociedad registró un beneficio de 103.953 euros, en línea con 2017.

 

La familia mantiene también la sociedad General Import, dedicada a la logística y que da servicio a las dos nuevas empresas. A esta es a la única sociedad a la que sigue vinculado como accionista Mario Malatesta, impulsor del negocio familiar.

 

Malatesta es un empresario emblemático del sector textil en España y fue el gestor durante 25 años del negocio de Max Mara en España. Via Emilia echó a andar en 2006 especializada en la distribución en el mercado español de firmas italianas de lujo y premium como Furla, Pinko o Liu Jo. En su consejo se sentaban Francesca y Claudia Malatesta, Emma Bernardini y Mario Malatesta, que presidía el órgano. Jordi Mercader, por su parte, ejercía de director general.