El nuevo presidente de Vivarte sale del grupo por falta de acuerdo con los accionistas

Vivarte pierde a su nuevo presidente. Stéphane Maquaire, el tercer preside del grupo en tres años, ha abandonado la compañía francesa de distribución de moda por falta de acuerdo con los accionistas. El ejecutivo fue nombrado a mediados de febrero y avanzó su incorporación a él para poner fin al proceso de reestructuración del grupo.

La decisión se tomó ayer en el consejo de administración del grupo, que también nombró a su sucesor, el ex presidente de Moulinex, Patrick Puy, según Les Echos. El nuevo directivo deberá tomar el nuevo cargo en los próximos días.

Vivarte lleva varios años inmersa en una profunda reestructuración de su negocio para sanear su deuda. El 2014, la compañía cambió de manos y pasó a estar controlada por un centenar de fondos, entre los que destacan Oaktree, Alcentra, Golden Tree o Banson, tras ejecutar una primera reestructuración de su deuda, que entonces ascendía a más de 2.400 millones de euros.

El pasado julio, Vivarte volvió a renegociar su pasivo por segunda vez. En esta ocasión, la deuda de la empresa ascendía a 1.500 millones de euros. La empresa inició entonces conversaciones con sus acreedores con miras a alcanzar un acuerdo con las entidades bancarias y poder pagar la deuda a finales de 2020.

En los últimos meses, la compañía gala ha intensificado las desinversiones y ha puesto también en venta marcas como Merkal, Kookaï, Chevignon y Patagas. Antes de verano, Vivarte también presentó un nuevo plan de desinversiones que contempla la venta de un centenar de establecimientos. El propósito de estas operaciones es lograr liquidez para poner en marcha un nuevo proyecto de inversiones.