Fast Retailing mide el golpe del Covid-19: hunde un 47,4% su beneficio entre septiembre y mayo
La matriz de Uniqlo entró en pérdidas en el último trimestre, en el que se concentró el impacto de la pandemia, y hundió sus ventas un 39,4%.
9 jul 2020 - 10:09
Fast Retailing pone cifras al golpe del Covid-19. El gigante japonés, dueño de Uniqlo y tercer mayor grupo de distribución de moda del mundo, ha cerrado los nueve primeros meses del ejercicio con un descenso del 47,4% en su beneficio, tras entrar en pérdidas en el último trimestre. Sólo en el tercer trimestre, cuando gran parte de sus tiendas estuvieron cerradas, el grupo hundió su facturación un 39,4%.
Entre septiembre y mayo, la empresa facturó 1.544.924 millones de yenes (12.718 millones de euros), un 15,2% menos, y ganó 91.475 millones de yenes (753 millones de euros), un 47,4% menos.
Aunque no da los datos por trimestres, el grupo entró en pérdidas en el último periodo, en el que se concentró el golpe del Covid-19, con un resultado neto negativo de 11.969 millones de yenes (98 millones de euros). Tras los malos resultados, Fast Retailing ha recortado un 4,8% su previsión de facturación para este año y un 15% la del beneficio.
Uniqlo redujo un 11,1% sus ventas en Europa y Norteamérica en los nueve primeros meses
“Este débil desempeño estuvo causado por el impacto del Covid-19, que motivó nuestra decisión de cerrar temporalmente nuestras tiendas o reducir el horario de venta al público”, explica la empresa.
“El empeoramiento del rendimiento empresarial también nos llevó a registrar pérdidas por deterioro de 15.200 millones de yenes (125 millones de euros)”, precisa. El grupo ha vuelto a asegurar que “nuestra visión a medio-plazo es convertirnos en el retailer de moda número uno en el mundo”, aunque hace ya años que no pone un horizonte temporal para esa meta.
Para lograr el objetivo, Fast Retailing quiere continuar abriendo flagship stores internacionales de Uniqlo, con China y el Sudeste Asiático como pilares de crecimiento; impulsar la red de tiendas de GU, principalmente en Japón, y expandir el ecommerce.
Uniqlo copa el 82,4% de las ventas del grupo (frente al 83,5% del mismo periodo del año anterior), con 1.272.375 millones de yenes (10.474 millones de euros) en los nueve primeros meses de 2019. La cadena genera casi la mitad de su facturación en Japón, y el resto se reparte principalmente entre China y el resto de Asia. Norteamérica y Europa sólo representan un 9,8% de la facturación total del grupo. Por su parte, GU copa un 12,1% y el segmento de Global Brands, un 5,4%.
Asia fue el continente más afectado en el periodo, con un descenso del 35,5%
En los nueve primeros meses del ejercicio, Uniqlo Japón encogió su facturación un 14,6%, hasta 598.800 millones de yenes (4.929 millones de euros), y redujo su beneficio operativo un 18,1%. Sólo en el último trimestre, entre marzo y mayo, la facturación cayó un 35,5% y el beneficio se desplomó un 74%.
En el extranjero, las ventas de Uniqlo se redujeron a mayor ritmo, con un descenso del 17,9%, hasta 673.500 millones de yenes (5.544 millones de euros), mientras que el ´beneficio operativo se hundió un 58,5%. Aún así, la empresa precisa que “las ventas online registraron un fuerte ascenso gracias a los esfuerzos para reforzar el márketing digital y expandir la entrega gratuita en todos los mercados internacionales”, añadió.
Por mercados, China registró una caída del 9,9%, pero ya ha comenzado a recuperarse a “un ritmo favorable” en mayo. En el resto de Asia, la empresa hundió su facturación un 35,5%. Tanto en Corea del Sur como en la región del Sudeste Asiático y Oceanía, Uniqlo cerró el último trimestre en pérdidas por la caída del turismo y el cierre de tiendas.
La empresa ha recortado un 4,8% su previsión de facturación
Lo mismo ocurrió en Norteamérica, donde alude a “una mayor caída en la facturación y unas mayores pérdidas operativas en el trimestre”. En Europa, la cadena registró una “aguda caída en los ingresos y pérdidas operativas ya que los tres mayores países en la región, Reino Unido, Francia y Rusia, estuvieron cerrados de mediados de marzo hasta finales de mayo”. En conjunto, las ventas de Uniqlo en Norteamérica y Europa se encogieron un 11,1%.
Por su parte, la cadena GU, que concentra el grueso de su distribución en Japón, elevó un 1,1% sus ventas en los nueve meses, pero redujo un 22,2% su beneficio, mientras que Global Brands retrocedió un 26,7% y registró unas pérdidas de 6.000 millones de yenes (49 millones de euros).
Fast Retailing ha recortado un 4,8% su previsión de facturación para este ejercicio, que finaliza el 31 de agosto, situándola ahora en 1.990.000 millones de yenes (16.382 millones de euros), lo que supondría una caída del 8,7% respecto al año anterior. La compañía anticipa un beneficio de sólo 100.000 millones de yenes (823 millones de euros), 15% menos de lo previsto inicialmente y una caída del 38% respecto al año anterior.