Hablemos de Zara: la estrella de Inditex, al menor ritmo desde 2018

Zara no es sólo el modelo de negocio que más ha impactado en la de la industria de la moda en las últimas décadas, ni tampoco es únicamente una de las marcas españolas más valoradas del mundo. Zara es, sobre todo, el motor del mayor grupo del mundo de gran distribución de moda: Inditex. Con casi tres cuartas partes del negocio del grupo concentradas en Zara, Inditex comenzó en 2023 a frenar su ritmo de crecimiento, a la vez que lo ha hecho el de su motor. Con los resultados del primer semestre de 2024, Zara crece al menor ritmo desde 2018.

La cadena estrella de Inditex inicio su desarrollo en 1975 con la puesta en marcha de su primera tienda en A Coruña y, diez años más tarde, nació Inditex. En los noventa, el grupo fundado por Amancio Ortega comenzó su diversificación con el lanzamiento de Pull&Bear, Bershka y Lefties y las adquisiciones de Stradivarius y Massimo Dutti. Oysho no llegó hasta 2001 a la órbita Inditex, a la que dos años más tarde se sumó Zara Home. En la diversificación de Inditex ha habido también cierres, como el de Often en 2006 y el de Uterqüe en 2022.

Con la excepción de H&M (que opera con H&M, Cos, Weekday, Cheap Monday, Monki, H&M home, &Other Stories, Arket y Afound), pocos gigantes de la industria de la moda han realizado un proceso de diversificación como el de Inditex. Gap, por ejemplo, cuenta con las cadenas Gap, Banana Republic y Old Navy, mientras Fast Retailing es propietario de Uniqlo y GU, así como otras marcas de mucho menor tamaño como Comptoir des Cotonniers.

La segunda mayor cadena del grupo, Bershka, es diez veces más pequeña que Zara, que desde 2020 aporta más del 70% de las ventas de la compañía

La diversificación no le ha servido a Inditex para reducir la dependencia de su cadena fundacional. De hecho, Inditex no ha logrado repetir el éxito de Zara y la segunda mayor cadena del grupo, Bershka, es diez veces más pequeña que Zara, que desde 2020 aporta más del 70% de las ventas de la compañía, teniendo en cuenta el negocio conjunto generado por Zara, Lefties y Zara Home, tres cadenas que el grupo une a la hora de proporcionar resultados. Pero si históricamente el peso de Zara iba a más, desde 2022 la tendencia es la contraria, algo que coincide con una ralentización del ritmo de crecimiento de la cadena que está derivado en un menor ritmo de desarrollo del grupo.

Hace una década, a cierre del ejercicio 2014, el negocio de Zara (incluyendo también Lefties y Zara Home) suponía el 67,02% del total de las ventas del grupo. Este porcentaje se fue elevando, año tras año, hasta rebasar el 69% en 2019, el 70% en 2021 y llegar al pico del 72,96% registrado en 2022. En 2023, el peso de Zara en el conjunto del negocio se redujo hasta el 72,47%, porcentaje que a cierre del primer semestre de 2024 ha descendido hasta el 72,15%.

La cadena estrella de Inditex ha ralentizado también su ritmo de crecimiento y, de hecho, hay que retroceder hasta 2018 para encontrar un incremento de ventas inferior (con excepción de 2020). Si en 2015 las ventas de Zara (incluyendo también Lefties y Zara Home) se elevaron un 17,72% respecto a 2014, en 2016 lo hicieron un 13,11%, para pasar a un crecimiento a un solo dígito en 2017, 2018 y 2019 y dispararse un 38,62% en 2021 (por la base comparativa del año del Covid-19) y un 21,32% en 2022.

En 2023, sin embargo, Zara volvió a crecer a un solo dígito, con un alza del 9,63% en sus ventas (hasta 26.050 millones de euros), porcentaje que se ha situado en el 5,43% en el primer semestre de 2024. El conjunto del grupo también ha frenado la evolución de sus ventas: si en 2022 creció un 17,51%, en 2023 lo hizo sólo un 10,37%, con aumentos de un solo dígito en el tercer y cuarto trimestre de 2023, tendencia que se ha mantenido en el primer y segundo trimestre de 2024.

La mayor exposición internacional de Zara la hacen el concepto del grupo más vulnerable al impacto de los tipos de cambio en las ventas. De las 5.692 tiendas que el grupo contaba a cierre de 2023, 2.221 correspondían a Zara y Zara Home, lo que representaba el 39% del total. A cierre del primer semestre, este porcentaje era del 38,75%.

De hecho, Zara es la punta de lanza de la expansión internacional del grupo y, si a cierre de 2023 Inditex operaba en 95 países, en Argentina, Aruba, Australia, Camboya, Chile, Macao, Dinamarca, EEUU, Islandia, Japón, Mónaco, Noruega, Nueva Zelanda, Paraguay, Perú, Puerto Rico, Sudáfrica y Uruguay sólo estaba con Zara.

Hace una década, a cierre del ejercicio 2014, el negocio de Zara (incluyendo también Lefties y Zara Home) suponía el 67,02% del total de las ventas del grupo; hoy es más del 72%.

Zara no es sólo la cadena que mayor volumen de ventas aporta a la compañía, también es la más rentable. En 2014, la actividad de Zara (incluyendo Lefties y Zara Home) copaba el 68,92% del beneficio antes de impuestos de la compañía. A cierre de 2023, este porcentaje se situaba en el 72,84%, con 5.004 millones de euros. Mientras las ventas se han ralentizado, el beneficio ha ido al alza: si en 2015 creció un 15,79% y en 2016 un 11,99%, se estancó en 2018 para dispararse un 38,48% en 2022 y un 25,04% en 2023.

Zara atraviesa un proceso de transformación desde hace ya varios ejercicios. La llegada de Marta Ortega a la presidencia de Inditex en 2022 ha traído consigo una apuesta por elevar el posicionamiento de Zara, reforzando “la creatividad, la innovación y la calidad”, en palabras de la propia compañía, en busca de una mayor rentabilidad.

Las colaboraciones, que comenzaron con nombres como Narciso Rodríguez (con perfumes en el mercado y, por tanto, cercano al gran público), han llegado a otros mucho más elevados como Stefano Pilati, destacado por su trabajo en Yves Saint Laurent. Esta estrategia se combina también con el lanzamiento de colecciones premium propias, como Atelier, y con una fotografía cada vez más cuidada en sus editoriales, firmados por fotógrafos de moda de renombre como Steven Meisel.