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Puig entra en el capital de la marca china de perfumería Scent Library

Los términos de la operación no han trascendido. La compañía china destinará el capital levantado a “desarrollar producto de perfumería conectados con la auténtica cultura china” y a reforzar la experiencia de cliente. 

Modaes

17 sep 2021 - 18:43

Puig entra en el capital de la marca china de perfumería Scent Library

 

 

Puig se refuerza en uno de sus mercados clave. El grupo catalán de perfumería ha invertido en Scent Library, una compañía china especializada en fragancias, según adelanta WWD. Los términos de la operación no han trascendido.

 

Scent Library destinará el capital a “desarrollar productos de perfumería conectados con la auténtica cultura china; la creación de una experiencia de consumidor profunda e inmersiva; la optimización y la integración de la cadena de valor de la marca, y el refuerzo del equipo”, según la empresa.

 

“Aliarnos con Scent Library era una oportunidad muy atractiva para participar en el desarrollo del mercado chino de perfumería con una empresa basada en China y con un equipo chino”, apuntó Marc Puig, consejero delegado de Puig.

 

Scent Library se fundó en Pekín en 2009 por parte de Roseline Lou y John Han. La empresa distribuye perfumes, artículos de cuidado personal y fragancias para el hogar y opera con ochenta tiendas en China, además de online.

 

 

 

 

El gigante asiático es, junto con el canal online, uno de los principales motores de crecimiento de Puig. El pasado agosto, la empresa se reforzó en el país con la apertura de la primera tienda de Christian Louboutin Beauty.

 

Teniendo en cuenta todas las marcas de la cartera actual del grupo (incluyendo Charlotte Tilbury, que se incorporó el año pasado, y el negocio de Derma, que se sumó este año), el negocio de Puig en China superó cien millones de euros en 2020, el doble que en 2019.

 

El grupo cerró el ejercicio con una facturación de 1.537 millones de euros, un 24% menos que en 2019, cuando ingresó 2.029 millones de euros. Sin tener en cuenta la compra de Charlotte Tilbury, que Puig adquirió el pasado junio en la que fue la mayor operación de su historia, el descenso fue del 32%.

 

Las pérdidas netas atribuidas se situaron en setenta millones de euros, frente a los números negros de 226 millones de 2019, y la previsión de la empresa pasaba por volver a beneficios este mismo año.