Vuelco en la cúpula de Salvatore Ferragamo: sale la consejera delegada

Salvatore Ferragamo sacude su cúpula. El presidente ejecutivo, Michele Norsa, y la consejera delegada de la compañía italiana, Micaela le Divelec, saldrán de la empresa el próximo abril, después de que se aprueben los resultados del ejercicio 2020, según WWD.

Los Ferragamo, que controla la empresa, planea recortar el número de miembros de la familia que forman parte del consejo de administración y aumentar el número de consejeros independientes. Los planes de la compañía pasan por elegir a un nuevo presidente no ejecutivo que sustituirá a Ferruccio Ferragamo, hijo del fundador.

Por su parte, se prevé que Michele Norsa abandone a compañía en abril. El ejecutivo se unió a la empresa en 2006 y, después de diez años al frente como consejero delegado, salió en 2016. En mayo de 2020, volvió a Salvatore Ferragamo en plena primera ola de la pandemia, que golpeó Italia con severidad. El directivo fue nombrado entonces miembro del consejo y presidente ejecutivo adjunto.

Salvatore Ferragamo quiere reducir el número de miembros de la familia en el consejo

Micaela le Divelec Lemmi, por su parte, se incorporó a Salvatore Ferragamo en 2018 procedente de Kering, donde fue directiva de Gucci. La ejecutiva se unió a la empresa como directora general y, cuatro meses más tarde, fue ascendida a consejera delegada, un cargo que ha mantenido hasta la actualidad.

El pasado octubre, el director de márketing de la compañía, Riccardo Vannetti, ya abandonó la empresa. Este miércoles, además, la compañía anunció que Claudio Costamagna se ha unido al consejo de administración. Previamente, el ejecutivo también fue miembro del consejo de Luxottica y Bulgari.

Salvatore Ferragamo entró en pérdidas en el primer semestre del ejercicio 2020 (finalizado el 30 de junio), registrando unos números rojos de 86,3 millones de euros, frente al beneficio de 60 millones de euros del mismo periodo de un año atrás. Las ventas del grupo, por su parte, se encogieron un 46,6% en los seis primeros meses, hasta 375,3 millones de euros. Sólo en el segundo trimestre, los ingresos de la compañía disminuyeron un 60,1%.