De Igualada a Mataró y de Vives Vidal a Abanderado: el íntimo pierde el hilo en las cunas del textil
18 sep 2015 - 04:47
Dos de las cunas del textil catalán, Igualada y Mataró (Barcelona), pierden a dos de sus empresas insignia. En Igualada, Vanity Fair (antes Vives Vidal Vivesa), que llegó a ser la tercera mayor compañía de íntimo de Europa, ultima el cierre del almacén que mantenía en la localidad y que era su último vestigio en la ciudad. En Mataró, DBApparel (antes grupo Sans), con emblemas como Abanderado y Princesa, reduce al mínimo su oficina en Mataró tras el último recorte de personal.
Vives Vidal fue uno de los puntales del textil en Igualada, abanderando a todo un gran grupo de empresas dedicadas sobre todo al punto, como Industrias Valls (Punto Blanco), Fabrilmalla (Jim) o Biosca Riera (Escorpión). Los orígenes de la actual Vanity Fair, que hace cinco años trasladó su sede a L’Hospitalet de Llobregat, se remontan a 1949.
El grupo se llamó Vives Vidal Vivesa hasta el año pasado, cuando llevó a cabo una fuerte reestructuración de su cartera de marcas. La compañía, que fundó el empresario igualadino Josep Maria Vives Vidal, tomó impulso gracias a la licencia internacional de la estadounidense Warner’s.
Más tarde, el grupo expandió el negocio con la creación de una marca propia, Intima Cherry, y la adquisición de otras, como Gemma o Belcor. A principios de los noventa, Vivesa fue adquirida por el grupo estadounidense VF Corporation por 154 millones de dólares con el propósito de integrarla a su cartera de marcas de íntimo, liderada por Vanity Fair.
“Llegamos a ser la tercera empresa de íntimo más importante de Europa”, recuerda Pere Prat, quien fuera presidente de Vives Vidal durante treinta años, desde 1975 a 2005. Al inicio de la década del 2000, Vives Vidal continuaba empleando en su planta de Igualada más de un millar de trabajadores y facturaba alrededor de 250 millones de euros. Desde hacía más de una década, la empresa había empezado también a deslocalizar parte de su colección con producciones en Túnez y Vietnam.
Seis meses después de la marcha de Prat, el grupo pasó a manos de otra empresa estadounidense, Fruit of the Loom, propiedad de Berkshire Hathaway, del magnate Warret Buffet, y dio un giro de 180 grados a su estrategia. Con la entrada de los nuevos inversores, la empresa fue reduciendo su actividad en Igualada hasta abandonar la ciudad de manera definitiva.
“Hoy todo ha cambiado en el íntimo y en el consumo, en general”, asegura Prat, propietario de una empresa de inversión. “Pienso que hoy en día el consumidor ha perdido interés en el íntimo, en sus materiales, en su diseño, a cambio de precio”, señala el empresario. “Ocurre en el íntimo lo mismo que en la moda, en la alimentación o en el turismo, el consumidor va a lo práctico, lo rápido, lo sencillo, lo simple y lo barato”, apunta.
De Sans a DBApparel
Grupo Sans, por su parte, fue uno de los estandartes de Mataró (Barcelona), otra de las cunas del textil catalán. La compañía ganó protagonismo gracias a la popularidad de marcas como Abanderado, Princesa, Ocean y Unno.
Fundada en 1960 por la familia Sans, la empresa acordó su venta a la multinacional Sara Lee en 1990. Quince años después, el grupo estadounidense se desprendió de su división de íntimo (que en 2004 había registrado una cifra de negocio de 1.200 millones de dólares), que vendió por cien millones de dólares al fondo Sun Capital.
En 2006, ya en manos del grupo inversor, la empresa contaba todavía con 1.200 trabajadores en plantas en Mataró, Castellar de Vallés, Igualada, Olván (Barcelona) y Hostalric (Girona). El nuevo propietario fue cerrando las diferentes fábricas y trasladó la sede en España de Mataró a Madrid. En 2012, las ventas del grupo ascendieron a 685 millones de euros.
El año pasado, y después de un largo periodo en venta, finalmente el grupo Hanesbrands se hizo con DBApparel por 550 millones de dólares. La primera medida que ha tomado el nuevo propietario ha sido adelgazar la estructura en toda Europa para unificar funciones comunes. En España, los recortes afectan sobre todo a la oficina que la empresa mantenía en Mataró con el propósito de concentrar la actividad comercial y de gestión en Madrid.
DBApparel, en cuya cartera se encuentran también marcas como Playtex, Dim o Wonderbra, ha perdido todo su protagonismo en Mataró, pero se ha convertido en un grupo internacional, con sede en París y una fuerte presencia en todos los mercados europeos. De hecho, la fuerte penetración en el continente europeo fue su principal atractivo ante Hanesbrands, que lidera el mercado del íntimo en Estados Unidos, Canadá y México.