El Mapa de la Moda 2019 (IX): Los grandes de la industria auxiliar
La estadounidense G-III Apparel Group sacudió el ránking de este año, subiendo hasta la tercera posición y superando a Gore-Tex.
25 jun 2019 - 04:44
En un contexto de cambios acelerados, incertidumbre y transformación radical del sector, ni si quiera los grandes tienen su lugar asegurado en el olimpo de la moda. Por octavo año consecutivo, Modaes.es vuelve a realizar la serie El Mapa de la Moda, que realiza un recorrido por los principales operadores del sector y su evolución durante el último ejercicio.
¿Quién lidera el negocio de la moda infantil? ¿Quién pierde posiciones en los grandes almacenes? ¿Se mantiene el top 3 de la gran distribución?
Patrocinado por Mixer&Pack, El Mapa de la Moda es un documento de consulta para los empresarios, directivos y profesionales del negocio de la moda y de sus sectores auxiliares. Cada capítulo figurará en Modaes.es como un artículo de análisis, para más tarde pasar a formar parte de un Dossier de consulta disponible en Modaes.es.
Nuevos movimientos entre los gigantes del aprovisionamiento y el textil. El sector, uno de los más sacudidos este año, sigue estando liderando con amplia ventaja por Li&Fung. Sin embargo, a partir de la segunda posición, todos han cambiado sus puestos. La austríaca Swarovski se alzó con la plata este año, mientras que la estadounidense G-III Apparel Group cerró el podio. El gigante chino Shenzhou pasó del sexto al cuarto puesto y su rival Crystal se ha vuelto a colar en el mapa y ha barrido a dos competidores hasta colocarse en la octava posición.
El sector, liderado por varias empresas asiáticas, se vio afectado en el último ejercicio por la guerra comercial entre China y Estados Unidos, y se volcaron en su mercado local para seguir creciendo.
Otro común denominador entre los mayores grupos del sector fue la apuesta por la sostenibilidad, que vienen desarrollando desde hace ya varios ejercicios, así como también avanzar en innovación tecnológica y acelerar sus procesos productivos.
Como en anteriores ediciones del Mapa de la Moda, quedaron fuera hiladores como Invista y Hyosung, ante la falta de cifras sobre sus ventas en el negocio textil. Por otro lado, continúan quedando a las puertas de entrar en este ránking la británica Coats o los gigantes indios Raymond o Arvind. Lycra, otro gigante del sector, pasó en 2018 a manos de Shangdong Ruyi.
Li&Fung, en la recta final del plan de reestructuración
“En 2018 enfrentamos más desafíos de los previstos”, subrayó William Fung, presidente del número uno de aprovisionamiento del mundo. Los cambios en el consumidor, la incertidumbre geopolítica y la liquidación de varias empresas del sector afectaron el transcurso de Li&Fung durante el último año. La compañía finalizó el ejercicio con su beneficio y sus ventas a la baja, aunque sigue liderando el ránking con amplia distancia con sus competidores.
El gigante chino se encuentra en la última fase de su plan a tres años, que inició en 2017 y culminará en 2019. Dicha estrategia está basada en tres pilares: velocidad, digitalización e innovación, todo con el fin de “crear la cadena de aprovisionamiento del futuro”.
Tras anotar unas pérdidas de 375 millones de dólares en 2017, Li&Fung volvió a ajustar su plan de transformación. Una de las estrategias para ganar velocidad fue la firma de una alianza con la empresa estadounidense Softwear Automation para desarrollar la primera cadena de producción de camisetas totalmente robotizada, con la que Li&Fung logrará fabricar camisetas básicas de algodón cada 22 segundos, dos veces más rápido que en su producción manual.
El proceso de transformación incluyó también cambios en el equipo directivo del grupo
asiático. Li&Fung colocó a Joseph Phi, un ex veterano de la casa, en la presidencia de la cadena de suministro, que reporta directo a Spencer Fung, consejero delegado de la compañía. A su vez, la empresa nombró a un nuevo director de operaciones y creó el cargo de chief digital officer.
Otro de los grandes movimientos de Li&Fung fue la venta del negocio de licencias de Global Brands en Norteamérica, que pasó a manos de Differential Brands Group por 1.380 millones de dólares. Unos meses más tarde, la empresa china creó un spin off para su negocio de logística, LF Logistics, que comenzará a cotizar en el parqué de Hong Kong.
Swarovski, el cristal tallado recupera ‘brillo’ hasta la segunda posición
El rey del cristal tallado se alza con la plata este año. Pese a seguir en manos de la quinta generación de la familia fundadora, la facturación de Swarovski en 2017 la sigue posicionando en lo más alto de la industria auxiliar de la moda. Con una cifra de negocio de 3.500 millones de euros, el grupo incrementó sus ventas un 4,2% respecto al ejercicio 2016.
La empresa divide su negocio en tres áreas: cristal, óptica y materiales técnicos para la construcción. Del total, el cristal tallado facturó 2.700 millones de euros en 2017, un 3,8% más que en el año anterior. Esta división también es la que cuenta con mayor capital humano, con 29.000 trabajadores de los 34.500 que el grupo tiene en plantilla.
En el último año, Swarovski amplió su red de retail con la apertura de doscientas nuevas tiendas, hasta sumar una red comercial de 3.000 puntos de venta, la mayoría de ellos ubicados en Europa. Pese a la expansión en distintos mercados, la compañía de cristal tallado dio un paso atrás en España, donde había instalado en un hub europeo.
El pasado verano, Swarovski cerró la oficina que tenía ubicada en Paseo de Gracia y mantuvo su estructura corporativa en otra de las filiales que tiene en Barcelona, que fue absorbida por la sociedad Swarovski Ibérica. Los cambios en el mercado español se iniciaron a principios de 2018 con la salida de tres altos ejecutivos de la filial del grupo austriaco en el país. La empresa se marcó el objetivo de eliminar duplicidades en los negocios que tiene en el extranjero. A principios de 2019, Swarovski trasladó de España a Italia su división de consumo.
En cuanto a sus otros negocios, Swarovski Optik, especializado en gafas, anotó una facturación de 156 millones de euros en el último ejercicio. Dicho segmento está presente en 92 países. En cambio, Tyrolit, que cuenta con 29 fábricas en once países, anotó unas ventas de 676 millones de euros en 2018 y dio empleo a 4.600 trabajadores.
G-III Apparel Group, año récord para escalar a la cima
Entrax ano de el lanzamiento de una nueva imagen con el objetivo de volver a crecer en 2020“Fue el mejor ejercicio de nuestra historia”, sentenció Morris Goldfarb, consejero delegado de G-III Apparel Group. La compañía estadounidense, que tiene las licencias de gigantes de la moda como Calvin Klein, Tommy Hilfiger o Guess, y es dueña de Donna Karan, escaló al top 3 y se colocó por primera vez en el tercer puesto entre los mayores grupos de aprovisionamiento del mundo. En el último año, la empresa sentó las bases para su futuro y consolidó su alianza con sus socios estratégicos.
Durante 2018, el grupo ha implementado nuevas acciones de márketing para impulsar y elevar el posicionamiento de sus dos caballos de batalla: Donna Karan y DKNY. En el ejercicio fiscal 2019, ambas marcas crecieron un 50%, hasta 400 millones de dólares. Desde su compra, G-III Apparel Group relanzó las dos firmas y aceleró su expansión en el extranjero, especialmente en países de Oriente Próximo, el Sudeste Asiático, Corea del Sur, China y Rusia. La empresa también se ha marcado el objetivo de reforzar la estrategia omnicanal con DKNY y Donna Karan.
G-III Apparel Group también sacó jugo de su negocio de licencias en 2018, especialmente de Calvin Klein, que aportó mil millones de dólares a las ventas totales del grupo en el último ejercicio. Karl Lagerfeld, por su parte, contribuyó con cien millones de dólares a la cifra de negocio total del grupo estadounidense. G-III Apparel Group entró en la compañía de Karl Lagerfeld en 2016, con una participación del 16% y llevó la firma del diseñador alemán a Norteamérica.
A pesar de la buena racha de algunas de sus marcas, G-III Apparel Group se mostró
“decepcionado” con la evolución de su negocio de retail y activó un plan estratégico con el fin de reducir sus pérdidas. Para ello, la empresa fichó a un nuevo presidente para la división, que se encargará de la reestructuración de la red de tiendas del grupo estadounidense, que planea cerrar el próximo ejercicio con 265 establecimientos. G-III
Apparel Group también reordenó su consejo tras la salida de Allen Srikin, quien fue reemplazado por Víctor Herrero, ex consejero delegado de Guess.
Shenzhou, cuarta posición aupada por su mercado doméstico
El gigante chino Shenzhou pudo sortear los desafíos del sector del último año y logró superar a sus competidores y colocarse cuarto en la lista. La compañía especializada en género de punto se vio impactada en el último ejercicio por el encarecimiento de las materias primas y de los salarios del sector a escala global. Sin embargo, el grupo supo sacar partido de dicho panorama, afianzándose en su mercado local, de donde obtuvo el 30% de su facturación total por primera vez en su historia.
Shenzhou, que mantuvo estable sus exportaciones en el último ejercicio, hizo hincapié en el flojo desempeño de su negocio en el extranjero, “como le ha ocurrido a cualquier empresa china durante el último año”, aseguró en su informe anual Ma Jainrong, presidente del consejo del grupo asiático.
Para hacer frente a la desaceleración de la demanda y la presión de los márgenes de su negocio, Shenzhou asegura que el negocio textil deberá apoyarse en cuatro pilares: la sostenibilidad, automatización, digitalización y eficiencia de los procesos de producción.
La compañía, que cerró el ejercicio con crecimientos a doble dígito, prevé seguir impulsando su facturación con el desarrollo de nuevos productos y la digitalización de todas las áreas de su negocio, con la implementación de digital data. El grupo chino ya había adelantado en el anterior ejercicio que contemplaba reducir su plantilla en reemplazo de tecnología y crear puestos de trabajo más cualificados. Además, Shenzhou prevé seguir expandiendo su producción a escala en las fábricas que tiene en el extranjero.
El grupo, proveedor de gigantes de la moda como Nike, Uniqlo o Adidas, seguirá expandiendo su capacidad productiva en Vietnam, donde ampliará su plantilla y reforzará su producción en lote antes del segundo semestre de 2019. Shenzhou también ha cerrado un acuerdo para construir una nueva planta en la ciudad de Phnom Penh, en Camboya,
que se espera que entre en funcionamiento a mediados de 2020.
Gore-Tex, más sostenibilidad e innovación
El gigante estadunidense EWL Gore&Associates sigue avanzando en innovación con el foco puesto en la moda. A pesar de haber retrocedido dos casilleros este año entre los principales grupos de la industria auxiliar, el fabricante ha vuelto a hacer foco en su negocio de prendas de vestir para seguir acercándose al consumidor final.
EWL Gore&Associates, que divide su negocio en segmentos como la electrónica, telas, cables, fibras, farmacéutica o la industria de la construcción, siguió redoblando sus esfuerzos en materia de sostenibilidad. En 2018, la división de moda Gore-Tex se sumó a la fundación Ellen MacArthur para formar parte de la iniciativa de economía circular de la moda. La sostenibilidad siempre ha sido uno de los motores del gigante estadounidense, que ya participaba en otros proyectos como la Sustainable Apparel Coalition (SAC).
Gore también avanzó en sostenibilidad. La empresa se marcó en 2017 el objetivo de eliminar el perfluorocarbono (PFC) de todos los artículos de su división de consumo para 2023 y durante el último año dio un paso más en este sentido. A principios del ejercicio,
Gore Fabrics lanzó su primera colección de prendas repelentes al agua libres de PFC.
En cuanto a innovación, Gore-Tex diseñó su primera línea de calzado con tecnología 3D, que presentó en ferias de Alemania y Estados Unidos especializadas en la práctica de deporte al aire libre. Sin embargo, ya desde principios de 2018, el grupo estadounidense elevó su apuesta por la moda deportiva, acercándose al athleisure con nuevos productos y soltar lastre en outdoor. En este sentido, el grupo estadounidense se alió con otros gigantes de la moda como Asics o Prada, a quienes aplicó su tecnología de impermeabilidad, entre otras alianzas.
El segmento Gore-Tex está especializado en ropa técnica y accesorios para la práctica de deportes extremos como el esquí o snowboard, así como también el ciclismo, el running y el senderismo.
YKK, las cremalleras japonesas bajan dos escalones
El gigante japonés YKK, especializado en la producción de cremalleras, sigue volcado en el objetivo de vender 12.888 cremalleras para 2020. Sin embargo, Hiroaki Otani, presidente del grupo, ha insistido en que más que una meta, dicha cifra es un barómetro para la compañía asiática. A marzo de 2018, la empresa había vendido 9.530 millones de cremalleras.
YKK no cerró un buen año y descendió dos escalones en el ránking de este año. El grupo finalizó el último ejercicio con sus ventas y su beneficio a la baja, situándose lejos de las ventas de 2014, cuando cerró uno de sus ejercicios récord, al facturar 880.000 millones de yenes (7.174,3 millones de euros).
La empresa está inmersa en un plan de crecimiento cuantitativo, iniciado en 2017 y que prevé concluir en 2020. Con este proyecto, YKK contempla vender “mejores productos a menor precio y a mayor velocidad”. Otro de los objetivos que se ha marcado la compañía nipona es el de hacer más sostenible su producción, especialmente en su división de
arquitectura.
El plan de expansión de YKK consta de mejorar sus áreas de prendas de vestir e industrial, que da soporte a sectores como el calzado o el automotriz. La empresa prevé acelerar sus tiempos de producción, diversificar sus productos, mejorar los tiempos de entrega y fortalecer la competitividad de sus costes.
YKK también ha invertido en infraestructura en el mercado asiático y concluyó las obras de ampliación de su fábrica en India, donde además puso en marcha un nuevo centro de distribución. En cuanto a la innovación de su producto, el grupo japonés lanzó unas nuevas cremalleras enfocadas para el segmento infantil, que mejoran la seguridad de los niños a la hora de vestirse.
Texhong Textile, más innovación para subir dos escalones
En el último ejercicio, el gigante chino Texhong Textil siguió buscando optimizar sus procesos productivos, de innovación y tecnología. La empresa, especializada en hilandería, saltó dos casilleros este año y le robó el séptimo lugar a Lenzing y la octava posición a su competidor chino Weiqiao Textile.
La compañía está persiguiendo el objetivo de integrar verticalmente su producción. Para ello, Texhong Textile selló un acuerdo con Winnietex Group, especializado en tejeduría y teñido, con quien conformó una joint venture, participada en un 80% por Texhong Textile. El acuerdo prevé sacar partido de los recursos de ambas compañías y mejorar sus procesos de producción.
El grupo, que está inmerso en un plan de crecimiento a dos años, realizó una serie de inversiones en 2018 con el fin de aumentar su capacidad productiva y seguir incrementando sus ventas. En el último ejercicio, Texhong Textile disparó su facturación un 17,5% hasta 19155,7 millones de yuanes (2.537 millones de euros), pero contrajo su beneficio con leve descenso del 0,6% respecto a 2017.
Por segmentos, las líneas de teñido y acabado textil, nuevas para Texhong Textile, generaron pérdidas para el grupo debido a la baja demanda. De cara a 2019, la empresa prevé hacer rentable dicho negocio, así como también el de su producción de denim. En cuanto a su línea de confección, con la que opera a través de una joint venture con Changzhou Hualida, la misma entró en beneficios en 2018.
En cuanto a su expansión internacional, la compañía china resaltó el buen desempeño de su negocio en Vietnam y anunció que pondrá en marcha nuevas fábricas de producción vertical en China, Nicaragua, Turquía y Vietnam, de la mano de Winnitex Group, mientras que las factorías que ya tiene en los dos primeros países especializadas en tejeduría, teñido y acabados saldrán de números rojos en 2019, gracias al impulso que le dará el nuevo socio de Texhong Textile.
Crystal, la bolsa da impulso al ‘nuevo’ del listado
La china Crystal cerró el primer ejercicio completo después de salta a bolsa en 2017, motivo por el que entró en el selectivo de los gigantes de la industria auxiliar el año pasado. Si bien el incremento de sus ganancias fue moderado, Crystal disparó sus ingresos a doble digito en 2018, lo que le permitió colocarse este año en la octava posición, dos puestos más arriba que en el Mapa de la Moda de 2018.
Crystal aseguró que el mayor desafió que enfrentó en 2018 fue el de hacer frente a la incertidumbre de la economía mundial, que trajo consigo fluctuaciones en los tipos de cambio, especialmente en los cuatro primeros meses del ejercicio. Sin embargo, la compañía destacó que la guerra comercial puede jugar a favor de empresas como Crystal, ya que pondrá a prueba a los distintos actores de la industria en el que “sólo sobrevivirán los grandes”.
Desde su salto al parqué, la compañía china se marcó el objetivo de ser la mayor empresa de aprovisionamiento del mundo. Para ello, Crystal ha acelerado en términos de innovación y tecnología con la incorporación de inteligencia artificial y big data para el lanzamiento de nuevos productos y mejorar la eficiencia de sus procesos. En paralelo, la empresa ha desarrollado también un plan a cinco años de cuidado del medio ambiente, para reducir el impacto de su negocio de cara al próximo lustro.
Crystal divide su negocio de aprovisionamiento en cinco categorías: lifestyle, denim, íntimo, moda deportiva y punto., siendo uno de los pocos gigantes del sector con una cartera de productos tan amplia. En los últimos años, la compañía ha ido diversificando cada línea de su negocio con nuevos lanzamientos con el objetivo de incrementar sus ventas. El denim y las prendas de lifestyle coparon el grueso de la producción de Crystal en 2018, con una participación del 25% y 38%, respectivamente.
Lenzing, el titán de la viscosa penalizado por la demanda
La caída mundial de la demanda de productos de viscosa afectó a Lenzing en el último año. El rey austríaco de la viscosa contrajo su facturación un 3,7% respecto al ejercicio anterior, cuando había anotado un récord en ventas. Esta vez, la empresa cayó dos puestos en el ránking de los mayores fabricantes del mundo, hasta casi el fondo del listado.
La compañía activó un plan estratégico para acelerar en innovación, que también lo llevó a hundir un 47% su resultado neto en 2018, anotando unas ganancias de 148,2 millones de euros. Stefan Doboczky, consejero delegado de Lenzing, explicó en la presentación anual de sus resultados que el último ejercicio fue uno de los más “desafiantes” para la compañía, a pesar de haberlo calificado como “el cuarto mejor año” en la historia de la empresa austríaca.
Lenzing desarrolló su expansión en 2018 en base a la estrategia Core Ten Corporate, con el que reforzó su apuesta por las fibras especiales, con el aumento de la producción de pulpa. Además, el fabricante de viscosa se marcó el objetivo de hacer sostenible toda su producción para 2020 y para ello, la empresa puso en marcha un plan de inversión de cien millones de euros, orientado a la incorporación de nuevos procesos de fabricación y nuevas tecnologías. La compañía prosiguió su diversificación en el último ejercicio, con el lanzamiento de nuevas fibras como Refibra, Ecovero y Tencel Luxe, para la que puso en marcha una planta piloto.
En el último ejercicio, Lenzing reforzó su músculo productivo en su mercado local con la construcción de una nueva factoría en la localidad austriaca de Heiligenkreuz. Por otro lado, el grupo congeló el proyecto de expansión de su fábrica de Estados Unidos debido a la tensión de global de la economía y para centrarse en mejorar su producción en Tailandia. A su vez, el gigante de la viscosa se hizo con la totalidad de su fábrica en China, al adquirir el 30% del capital.
De cara al próximo ejercicio, la compañía pilotada por Stefan Doboczky estudia crear una joint venture con la brasileña Duratex, con el fin de desarrollar una planta en el país sudamericano para la disolución de pulpa de madera, materia prima de la viscosa.
Weiqiao Textile cae al final del listado
Weiqiao Textile comenzó en 2018 a cosechar los frutos de la reorganización iniciada el año anterior. La empresa china especializada en tejeduría logró reducir sus costes y disparó sus ganancias un 23,3% en el último ejercicio y anotó un récord de ventas, pese a haber mantenido en plano sus ingresos, con un alza de sólo un 0,5%. Sin embargo, la facturación del último año no le alcanzó a Weiqiao Textile, que bajó dos escalones en el lisado hasta la última posición.
En plan de recortes para reducir también su deuda, el grupo asiático redujo la mano de obra intensiva de sus fábricas, con el fin de ahorrar costes hasta un 1,8%, mejorar las capacidades operativas y ser más competitivos. Al plan de transformación del anterior ejercicio se le sumó este año el parón de la economía mundial y la incertidumbre por la guerra comercial entre China y Estados Unidos. En este sentido, Weiqiao Textile seguirá innovando en su producción con el lanzamiento de nuevos artículos, pero también con la entrada en nuevos mercados.
Además, el gigante chino desarrolló 1.912 nuevos productos a lo largo del último año. La compañía puso en marcha un nuevo concepto de desarrollo de producto, manteniendo el objetivo de mejorar la calidad de los mismos y elevar su eficiencia. Para su segmento de acabados, la empresa transformó su línea made by Weiqiao a created by Weiqiao, para elevar su apuesta por productos más orientados al consumidor final.
Igual que sus otros competidores chinos, Weiqiao Textile resaltó las fluctuaciones del mercado de materias primas, especialmente las del algodón, que copó el 40% de su negocio en 2018. La compañía está especializada en hilatura, tejido en crudo y denim.