Desigual reduce su facturación un 3% en 2015 y sufre una caída de su beneficio del 24%
16 mar 2016 - 09:00
Desigual despide el ejercicio 2015 con mal sabor de boca. La compañía, que en 2014 dio entrada al fondo francés Eurazeo en su capital, ha finalizó el pasado ejercicio con una contracción en sus ventas del 3%, hasta 933 millones de euros, tras más de veinte años consecutivos de crecimiento.
El resultado del grupo catalán liderado por Thomas Meyer también se ha visto penalizado. El beneficio bruto de explotación (ebitda) de Desigual se situó en 2015 en 200 millones de euros, con una caída del 24% en relación al ejercicio anterior. Desigual atribuye la caída del resultado a la contracción de su facturación y al “esfuerzo inversor realizado en la apertura de tiendas, especialmente en el último trimestre de 2014”.
Por mercados, mientras que Francia y España registraron un descenso en su cifra de negocio, el resto de países donde la compañía tiene presencia ha evolucionado de manera positiva. No obstante,Desigual no segrega datos de ventas por países.
Desigual, que finalizó el pasado ejercicio con una red de más de 500 tiendas monomarca y presencia en un centenar de países, pondrá en marcha un plan estratégico de transformación para reconducir sus resultados en los próximos años.
El grupo inició una revisión de su modelo de negocio en el último trimestre de 2015 y puso en marcha un plan de eficiencia, que continuará durante el año en curso con el objetivo de mejorar la rentabilidad de la compañía. Desigual ha contado con el asesoramiento de The Boston Consulting Group.
Según la compañía, el nuevo plan estratégico de transformación a medio plazo tiene como objetivo preparar al grupo para la siguiente fase de crecimiento
Entre otras áreas, Desigual revisará su red de distribución, los mercados en los que opera y sus categorías, que están siendo sometidas a revisión para “adoptar las acciones más adecuadas” para volver a la senda de la rentabilidad a corto y medio plazo, tal y como detalla el grupo en un comunicado.
Según la compañía, el nuevo plan estratégico de transformación a medio plazo tiene como objetivo preparar al grupo para la siguiente fase de crecimiento. La estrategia de transformación pasa por definir un modelo de negocio orientado al cliente, apostando por la innovación en el producto y la optimización de las sinergias entre los diferentes canales en los que opera la compañía.
Esta transformación se materializará en las próximas temporadas, “en una nueva segmentación de la colección y una mayor renovación del producto en tienda (hasta cuatro veces por temporada) para ajustarse a la demanda del consumidor”.
Para liderar este cambio, Desigual ha llevado a cabo recientemente el nombramiento de Pierre Cuilleret, fundador de The Phone House, y Alberto Ojinaga, ex director general de Caprabo, como nuevos responsables de cliente y director corporativo, respectivamente. Cuilleret está al cargo de las áreas directamente relacionadas con el cliente, márketing y comunicación. Por su parte, Alberto Ojinaga lidera desde el pasado febrero las funciones corporativas que integran la gestión de recursos y operaciones.