Abercrombie&Fitch cierra su mejor primer trimestre desde 2008 y recupera niveles pre-Covid

Abercrombie&Fitch sale reforzada tras la pandemia. La compañía estadounidense ha cerrado el primer trimestre (finalizado el 1 de mayo) recuperando los niveles previos al estallido del Covid-19 y con su mejor resultado bruto desde 2008, según ha comunicado hoy la empresa.

Entre marzo y mayo, el grupo facturó 781,4 millones de dólares, lo que supone un incremento del 61% respecto al mismo periodo de 2020, el más afectado por los cierres derivados de la pandemia, y del 6% en relación al primer trimestre de 2019. En Estados Unidos, su mayor mercado, la facturación está ya un 18% por encima de 2019.

La empresa precisa que el crecimiento se dio a pesar de que Abercrombie redujo un 20% su red comercial respecto al primer trimestre de 2019, con 120.000 metros cuadrados menos. El negocio online, por su parte, se disparó un 45% y representa ya un 52% de la facturación del grupo.

Abercrombie&Fitch ya genera más de la mitad de sus ventas a través del canal online

El resultado operativo fue de 48,8 millones de dólares, el mejor en este periodo desde 2008, que fue un año récord para el grupo. El resultado neto se situó en 41,8 millones de dólares, frente a las pérdidas de 244,1 millones del primer trimestre de 2020.

El margen bruto aumentó en 900 puntos básicos, hasta el 63,4%, gracias a un mayor control de las promociones y un mayor precio medio de venta por artículo (AUR, en sus siglas en inglés).

“El primer trimestre es prueba de que nuestro cambio hacia un modelo de negocio impulsado por el digital está funcionando”, ha dicho Fran Horowitz, consejera delegada de Abercrombie&Fitch.

“El impulso ha continuado en el segundo trimestre en todas las marcas, y la reacción inicial a Social Tourist ha sido asombrosa”, ha añadido la directiva, en relación a la marca que el grupo lanzó el pasado mayo de la mano de las tiktokers Charlie y Dixie D’Amelio.

En Estados Unidos, la facturación creció un 18% respecto al primer trimestre de 2019

Hollister (que engloba también la marca Gilly Hicks) continúa copando algo más de la mitad de las ventas, con una facturación de 442 millones en el primer trimestre, un 62% más que el año anterior. Abercrombie, por su parte, aportó 339 millones de dólares, un 60% más.

Por regiones, Estados Unidos lideró el crecimiento con un alza interanual del 72%, hasta 553,8 millones de dólares. El segundo mayor mercado para la empresa es Europa, Oriente Próximo y África, con unas ventas de 159 millones de dólares en el primer trimestre, un 41% más, mientras que Asia Pacífico creció un 42% y aportó 46 millones de dólares a la facturación.

A 1 de mayo, Abercrombie tenía caja y equivalentes de 900 millones de dólares, frente a los 700 millones de dólares de un año antes. El inventario se ha reducido un 9% en el último año, hasta 389 millones de dólares.

La empresa cuenta con 731 tiendas, tras cerrar ocho y abrir cuatro durante el ejercicio. De ellas, 499 son de Hollister y el resto, de Abercrombie. El dato incluye las tiendas internacionales gestionadas por socios franquiciados.