Fina García: 16 millones en ventas, salto internacional y reorganización en España
La cadena catalana de joyería traza un plan de crecimiento con el objetivo de expandirse a escala internacional y abrir tiendas propias fuera del país. En 2026, la empresa prevé entrar en los mercados de Portugal y México.


Fina García mira a los mercados internacionales. El grupo de joyería, fundado en 1988 por Fina García y que hoy en día sigue controlado por la familia, impulsa un plan de crecimiento para dar el salto fuera de España a principios de 2026. A cierre de este año, la empresa augura ventas de 16 millones de euros, un 7% más respecto al ejercicio de 2023.
Con el objetivo de “acercar la joyería a las familias”, la empresa está desarrollando un porfolio de cuatro marcas con identidad propia para diversificar su público y posicionarse a escala internacional a través de su entrada en los mercados de Portugal y México.
Las marcas propias con las que opera la compañía son Fina García, Customima, Relojes Casanova y Tesi García, una gama de joyería de acero que la empresa ha añadido recientemente a su cartera de marcas para atraer al público joven.
Fina García prevé dar el salto a Latinoamérica en 2026
Además, también vende la marca de relojes Marea, los piercings Studex y colabora con la marca india Solitario para su oferta de diamantes creados.
En palabras del consejero delegado de Fina García, Francesc Casanovas, “con esta diversificación queremos que cada miembro de la familia sepa a qué marca ir y cuál de ellas representa sus intereses”, y añade que “son marcas armónicas con la estética de Fina García, pero diferenciales”.
Enfocar cada una de sus marcas a un nicho de público específico permitiría al grupo de joyería expandirse a escala internacional, puesto que, según explica Casanova, “necesitan hacer una marca con esencia propia para ir fuera convencidos y que los clientes internacionales se sientan atraídos”.
La compañía de joyería opera con 23 joyerías repartidas por España
La empresa prevé abrir tiendas propias en Portugal y, posteriormente, en México. “Apostamos por un país en el que la marca España realmente se valora”, afirma el consejero delegado, y añade “que Europa presenta unos problemas en cuanto a cultura e idioma que en Latinoamérica no los tenemos”.
Actualmente, Fina García cuenta con un total de 23 joyerías distribuidas en las cuatro provincias de Cataluña, así como en Madrid y Marbella, donde el grupo de joyería aterrizó en primavera del año pasado.
De las 23 joyerías, hay quince que se ubican en Barcelona y su área metropolitana, lo que, en palabras de Casanovas, “hace que algunas de ellas se canibalicen”. Por este motivo, la empresa está estudiando cerrar algunas joyerías para trasladarlas a puntos estratégicos de capitales de provincia.
Recientemente, la compañía ha impulsado una iniciativa llamada Jewelry truck, que, a través de una furgoneta cargada con una muestra de productos, viaja por diferentes territorios de Cataluña.
Fina García prevé aumentar su facturación un 7% en el presente ejercicio
La iniciativa, según los responsables de la empresa, les aporta un doble beneficio. Por un lado, les sirve para hacer una aproximación a nuevos espacios y tantear la posibilidad de abrir nuevas tiendas. Por otro lado, les permite sumar ventas. “Los clientes nos ven online, pero necesitan a una persona para concretar su compra, y mover el Jewelry truck a diferentes puntos de Cataluña nos permite rematar las ventas”, explica el consejero delegado.
Fina García, que hoy en día emplea a más de cien personas, logra actualmente el 4% de sus ventas a través de su tienda online. No obstante, según asegura el ejecutivo “este porcentaje sube hasta el 10% si tenemos en cuenta los clientes que han comprado gracias al online, que lo utilizamos de catálogo”.
La empresa catalana de joyería, que basa gran parte de su negocio en las joyas de oro y las alianzas de boda, cerró el pasado año con una facturación de 15 millones de euros. Para este ejercicio, Fina García prevé una cifra de negocio que alcance los 16 millones de euros.