Foot Locker renueva su liderazgo con una nueva consejera delegada tras reducir su rentabilidad

Foot Locker da un vuelco en su cúpula. La compañía estadounidense de moda deportiva ha renovado su liderazgo con el nombramiento de Mary Dillion como consejera delegada y presidenta. A su vez, Richard Johnson, el hasta ahora principal ejecutivo de la compañía, abandonará su cargo, aunque seguirá formando parte del consejo de administración de la compañía.  

La cadena estadounidense de distribución de moda deportiva ha finalizado la primera mitad del ejercicio (terminado a 30 de julio) reduciendo su facturación un 4,4%, hasta 4.240 millones de dólares. Del mismo modo, la empresa ha rebajado su rentabilidad en un 63% en el periodo, pasando de 632 millones de dólares en la primera mitad de 2021 a 227 millones de dólares en el ejercicio en curso.

La empresa ejecutó a lo largo del semestre hasta 58 aperturas físicas, mientras que, por su parte, cerró 117 locales en los mercados donde opera. El mayor número de cierres se concentró en Estados Unidos, donde Foot Locker bajó la persiana en más de cuarenta tiendas mientras que, en Europa, sólo se cerraron siete puntos de venta.

“En nombre de la Junta y de todo Foot Locker, extiendo nuestro más profundo agradecimiento a Dick por su dedicación, liderazgo y destacadas contribuciones a lo largo de sus 30 años en la empresa”, ha señalado la empresa.

Foot Locker ha cerrado hasta 117 locales en los seis primeros meses del ejercicio

Foot Locker ha anunciado una alianza con Fanatics, por la que la empresa suministrará a la empresa con sus productos para que los venda a través de su plataforma web. “Estamos entusiasmados de asociarnos con Fanatics para seguir ofreciendo más opciones a nuestros consumidores y mejorando nuestro posicionamiento omnicanal”, destaca Foot Locker en un comunicado.

Foot Locker se encuentra en pleno proceso de diversificar su mix de vendedores, con la intención de reducir su presencia a Nike, que actualmente copa el 65% de su oferta. La compañía tiene el objetivo de que, a cierre de 2022, el producto del gigante de Oregón suponga el 60% de sus pedidos. 

La cadena también está en proceso de minimizar sus costes con el objetivo de ahorrar aproximadamente doscientos millones de dólares al año y reducir su presencia en centros comerciales, fortaleciendo su red de distribución a pie de calle.