Entorno

‘Efecto Trump’: proteccionismo, geopolítica y cambio climático marcarán la economía mundial

El retorno de Donald Trump a la Casa Blanca podría poner en peligro el futuro de la economía mundial, que puede llegar a generar un daño de hasta 475.000 millones de dólares en el PIB de las economías de la Unión Europea.

‘Efecto Trump’: proteccionismo, geopolítica y cambio climático marcarán la economía mundial
‘Efecto Trump’: proteccionismo, geopolítica y cambio climático marcarán la economía mundial
Trump podría costar a la economía de la UE hasta 475.000 millones de dólares.

Celia Oliveras

14 ene 2025 - 05:00

A seis días de la toma de poder de Donald Trump, los efectos de su llegada al poder se podrían extender por todas las economías mundiales. Un mayor proteccionismo derivado de las guerras comerciales entre países, la escalada de tensión en conflictos activos y el riesgo climático son algunos de los riesgos que pondrán en peligro el crecimiento mundial en 2025, según la agencia crediticia S&P.

 

“Incluso antes de su toma de posesión, la segunda administración de Trump ya está modificando la aguja macrofinanciera y elevando los riesgos para la economía mundial”, ha asegurado la entidad en su último informe Global Credit Outlook 2025. El grado en el que Trump decida implementar algunas de las políticas que ya ha anunciado, continúa S&P, será clave para el futuro.

 

El auge del proteccionismo es el principal riesgo al que se enfrentará la economía mundial. Desde el anuncio de su victoria en las elecciones presidenciales a finales de 2024, el futuro ocupante del ala oeste de la Casa Blanca ya ha anunciado diferentes medidas como el incremento de aranceles a China, México y Canadá o su intención de comprar Groenlandia o el Canal de Panamá.

 

 

 

 

“La nueva administración ha priorizado el incremento de aranceles a sus socios comerciales, incluyendo China, a lo que anticipamos represalias comerciales”, relata el informe. A pesar de que el informe asegura que los ganadores y perdedore de las guerras comerciales todavía no se pueden prever, estas tensionaran la cadena de suministro global, creando una mayor presión inflacionaria en algunos mercados y complicando las políticas de los bancos centrales.

 

Una mayor inflación y el incremento del gasto público (que S&P relaciona con un incremento del gasto en defensa derivado, precisamente, del auge del proteccionismo), además, podría frenar el ritmo de reducción de los tipos de interés que han iniciado muchos bancos.

 

Trump es únicamente el primero de los factores que podrían arriesgar la resiliencia de la economía mundial que prevé la entidad para los próximos años. Según los cálculos de la entidad, el crecimiento previsto para el PIB mundial se sitúa en un 3% para 2025. Las esperanzas de la entidad para el crecimiento mundial, sin embargo, deberán enfrentar también las tensiones geopolíticas al alza, especialmente en la región de Oriente Próximo.

 

Los conflictos activos en la región, que S&P prevé que puedan intensificarse a lo largo del año, ponen en peligro la cadena de aprovisionamiento global y reducir el flujo de inversiones extranjeras, derivando en una mayor volatilidad del mercado financiero. El incremento de los riesgos climáticos, derivado de los desastres naturales cada vez más frecuentes, también elevarán el gasto de los países. “A la vez, el camino hacia una economía neutra en carbono obligará a llevar a cabo mayores inversiones”, añade el informe.

 

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde) ya alertaba en la última edición de su informe sobre las perspectivas globales de los riesgos de la llegada de Trump al poder. “Un mayor proteccionismo, especialmente proveniente de las grandes economías, es uno de los riesgos claves”, aseguraba la entidad.

 

A pesar de no alcanzar los niveles de incerteza registrados a mediados de 2019, cada vez más países y bienes se enfrentan a un mayor número de problemas para importar y exportar productos a través de las fronteras globales.

 

Según los datos de la Ocde, un 12,7% de las importaciones de las economías del G20 están afectadas actualmente por algún tipo de medida proteccionista. La cifra es hasta tres veces más alta que hace cinco años. “El aumento de las medidas comerciales restrictivas puede elevar los precios, debilitar la inversión y desacelerar la innovación, lo que, en última instancia, puede reducir el crecimiento a nivel mundial”, alerta la Ocde en el texto.

 

 

 

 

Según un estudio de la consultora global Roland Berger, de hecho, para el final de su segundo mandato, el potencial daño de las políticas trumpistas a las economías de la Unión Europea alcanzará los 475.000 millones de dólares, el equivalente a un 3% del Producto Interior Bruto (PIB) de los países comunitarios. En el caso de China, los daños se alzarán hasta los 1,6 billones de dólares, un 10% del PIB de la potencia.

 

Las decisiones del mandatario, sin embargo, también afectarán a la economía estadounidense, y según los mismos datos, el daño estimado para el país será de hasta 900.000 millones de dólares, un 4% de la economía. “En los últimos años también hemos visto un aumento del número de reformas para resguardar la seguridad nacional, creando obstáculos para las inversiones transfronterizas”, alerta el Ocde en su informe.

 

 

Trump es únicamente el primero de los factores que podrían arriesgar la resiliencia de la economía mundial que prevé la entidad para los próximos años. Según los cálculos de la entidad, el crecimiento previsto para el PIB mundial se sitúa en un 3,3% para 2025 y 2026. “La economía mundial ha demostrado resiliencia, con ratios de inflación cada vez más moderados y una reactivación del comercio mundial”, valora la Ocde.

 

Las esperanzas de la entidad para el crecimiento mundial, sin embargo, deberán enfrentar también las tensiones geopolíticas al alza, especialmente en la región de Oriente Próximo. Los conflictos activos en la región, que la Ocde prevé que puedan intensificarse a lo largo del año, ponen en peligro la cadena de aprovisionamiento global, especialmente en la producción de energía. “Nuestras proyecciones se basan en una evolución estable de los precios de la energía, alimentos y las commodities”, alerta el informe.