Nextil remodela su consejo de administración con dos nuevos nombramientos

Nextil remodela su cúpula. En el marco de la junta general de accionistas celebrada el pasado 12 de junio, la compañía industrial ha remodelado las sillas de su consejo de administración con dos nuevos nombramientos tras la renuncia de dos miembros.

La empresa ha incorporado a su máximo órgano de gobierno a Guillermo Guerra Martín como nuevo secretario no consejero y a Jacobo Palanca Reh como vicesecretario no consejero. Estos cambios se producen tras la renuncia de Mónica Martín y Juan González, que ocupaban ambos puestos respectivamente.

Guillermo Guerra Martín es un abogado de larga trayectoria y actualmente socio del despacho Gómez-Acebo&Pombo, igual que Jacobo Palanca Reh, que está especializado en asuntos de gobierno corporativo y derecho societario de entidades cotizadas.

Además, la empresa ha acordado el nombramiento de Fernando Diago de la Presentación como consejero independiente de la sociedad, como ya anunció el pasado mayo. El directivo, que ya formaba parte del consejo del grupo en representación de Lhotse Estudios y cuyo cargo en el órgano expira ahora, será presidente y vocal de la comisión de auditoría y vocal de la comisión de nombramientos y retribuciones, que estará presidida por Richard Rechter.

Nextil ha reelegido al resto de miembros del consejo de administración

En paralelo, la junta de Nextil ha acordado la reelección del resto de miembros del consejo, que tras los cambios ha pasado a tener la siguiente composición: como presidente se encuentra Eduardo Navarro, y como vocales están Manuel Martos, Rafael Bermejo, Fernando Diago, Richard Rechter, Juan José Rodríguez-Navarro y Alberto Llaneza.

En la junta de accionistas Nextil, que a finales de año fue traspasada por parte de Sherpa a un grupo de inversores, también trazó su nueva hoja de ruta con un nuevo plan estratégico que pasa por alcanzar unas ventas de 109 millones de euros (sin contar con los ingresos de la división Greendays) para 2026.

De cumplir con su objetivo, Nextil triplicaría en 2016 la cifra de negocio con la que cerró 2022, que ascendía a 39 millones de euros. Para 2023, la empresa pronostica un incremento de las ventas 20%, hasta 47 millones de euros.

El resultado bruto de explotación (ebitda) también tiene previsto crecer en los próximos años, pasando de cuatro millones de euros en 2023 a 23 millones de euros en 2026, lo que supondría un margen sobre las ventas del 21%.

La empresa finalizó 2022 con una caída de los ingresos del 21,6% debido al cierre de la fábrica de Dogi en El Masnou (Barcelona). En el periodo, Nextil registró unas pérdidas de catorce millones de euros.