La histórica Caramelo, a liquidación

Caramelo encara su liquidación. La histórica compañía gallega, controlada por el empresario Manuel Jove a través del fondo Inveravante, ha decidido presentar su liquidación ante el Juzgado de lo Mercantil de A Coruña y concluir su actividad. La empresa, que ya ha nombrado a un liquidador, pretende vender sus activos para encarar las deudas con trabajadores y proveedores.

Según han informado a Modaes.es fuentes de Inveravante, Caramelo ha decidido ir a liquidación directa, descartando la presentación de un concurso voluntario de acreedores para tratar de recuperar su viabilidad.

“Desde la firma textil se ha hecho todo lo posible para intentar recuperar la senda de la rentabilidad una vez que pudo superar el concurso de acreedores en 2014, tomando diferentes medidas, como la apertura de nuevas tiendas o el relanzamiento de la marca, además de la búsqueda del equipo directivo que mejor encajase con la realidad de la empresa”, han señalado desde la empresa a través de un comunicado.

“A pesar de ello –prosigue el escrito-, Caramelo no ha conseguido superar las pérdidas de los últimos ejercicios, viéndose abocada a la liquidación; la actividad de Caramelo se ha visto seriamente dañada por la profunda crisis de consumo que ha afecta a toda Europa y, de forma particular a España, mercado al que la empresa ha estado excesivamente expuesta en los últimos años”.

La empresa afirma haber hecho “todo lo posible para intentar recuperar la senda de la rentabilidad” tras salir del concurso en 2014

La compañía ya pasó por los juzgados, ejecutó una profunda reestructuración entre 2013 y 2014, que implicó el despido de 180 trabajadores, el cierre de cincuenta corners en El Corte Inglés y la reducción de su red de tiendas a menos de una decena.

A finales de septiembre, Caramelo despidió a su hasta entonces director general, Enrique Fernández del Riego (que asumió el cargo en 2012), debido a los malos resultados que arrastraba la compañía. Fernández del Riego llegó a Caramelo con la misión de internacionalizar el negocio, tras una trayectoria que le había llevado por empresas como Cortefiel o Marks&Spencer.

Según los últimos datos disponibles, Caramelo (participada en un 93% por Inveravante y en un 7% por la Xunta de Galicia) finalizó 2014 con una cifra de negocio de 13 millones de euros. Las previsiones de la empresa pasaban por crecer un 30% en 2015.

La empresa, que llegó a tener en el pasado una plantilla de 900 trabajadores, cuenta, según los últimos datos disponibles, con unos 180 empleados, de los cuales sesenta están en la sede de A Coruña y el resto es personal de tienda.