Adolfo Domínguez crece un 6,6% hasta noviembre y reduce sus pérdidas un 40,8%

Adolfo Domínguez recoge los frutos de su cambio de rumbo. La compañía gallega ha cerrado los nueve primeros meses del ejercicio (periodo concluido en noviembre) con unas pérdidas de siete millones de euros, un 40,8% menos que en el mismo periodo del año anterior.

La facturación de la empresa se incrementó un 6,6% entre marzo y noviembre, hasta 77,9 millones de euros. La empresa ha subrayado que las ventas por tienda también se mantienen al alza, con un avance del 9,5%.

El grupo, con sede en San Cibrao das Viñas (Ourense) ha proseguido la reestructuración de su red comercial, con el cierre de 31 establecimientos. A 30 de noviembre, Adolfo Domínguez contaba con una red de 490 puntos de venta en treinta países.

Adolfo Domínguez ha cerrado el periodo con 490 puntos de venta, 31 menos que el año anterior

Todos los principales mercados de la empresa elevaron sus ventas comparables en los nueve primeros meses del ejercicio. En México, la compañía creció un 15,2%; en Europa, un 10%, y en Japón, un 1%, lastrado por los tipos de cambio. La empresa no ha comunicado la evolución de sus ventas en España, donde la empresa destaca que creció “catorce puntos por encima de la media del sector en septiembre, doce puntos en octubre y ocho puntos en noviembre”.

La empresa se compara con la evolución de las ventas del comercio recogidas por la Asociación del Comercio Textil y Complementos (Acotex), que estima un ascenso de las ventas del 1,4% en septiembre, una caída del 12,3% en octubre y un alza del 2,7% en noviembre.

Por marcas, Adolfo Domínguez generó el 75,2% de la facturación, seguida de U, con un 20,7%. La compañía también mejoró su margen bruto, que se situó en 46,3 millones de euros, un 59,48% de las ventas. La reestructuración organizativa llevada a cabo en el ejercicio anterior y las medidas de gasto redujeron los gastos operativos hasta 52,7 millones de euros, frente a los 55,4 millones de euros del mismo periodo de 2016.

En el último año, Adolfo Domínguez ha puesto en marcha un plan de reorganización para volver a la senda del crecimiento que contempla cambios en la red comercial, con menos flagships, en la oferta, con mayor protagonismo de los complementos y en la marca, que ha apostado por un posicionamiento premium. Esta nueva etapa está siendo pilotada por un equipo de personas de confianza del diseñador, con su hija Adriana Domínguez al frente como directora general.