Igor salva el año de la pandemia: crece un 1% en 2020 y acelera en el extranjero

Igor se desmarca de las caídas del calzado y salva el año de la pandemia con crecimiento de la facturación. La empresa de calzado, pilotada por la segunda generación de la familia fundadora, ha cerrado 2020 con un crecimiento de la facturación del 1%, hasta superar los nueve millones de euros. De cara a este año, prevé acelerar al menos un 15% apoyado sobre todo en la internacionalización.

“El comercio ya venía renqueando antes de la pandemia y en marzo y abril parecía que se iba a acabar el mundo”, rememora Josu Altolaguirre, consejero delegado de Igor. Sin embargo, el verano le permitió salvar los muebles y el invierno, de récord, fue el último empujón para finalizar el año al alza.

La empresa está especializada en cangrejeras y botas de agua, por lo que su negocio es muy estacional. “El último trimestre fue espectacular, en parte por la falta de producto en Europa y el aumento de los costes de Asia, que llevó a muchas tiendas a buscar nuevos proveedores”, relata el ejecutivo.

Igor prevé crecer un 15% este año y que el mercado británico se convierta en el segundo más importante por ventas

Además, el buen momento de los botines Chelsea, uno de los bestsellers de la marca, y la colaboración que firmó con Verbenas también contribuyeron a cerrar un buen último trimestre del ejercicio.

Aunque en niño produce sólo bajo su propia marca, la empresa ha comenzado a diversificar su modelo de negocio y a producir para terceros en la línea de mujer. “Somos fabricantes y tenemos la ventaja de la flexibilidad”, apunta Altolaguirre. El negocio de marca blanca copa ya un 20% de las ventas y llegará al 30% este año.

Otro de los factores que han favorecido a Igor en el último año ha sido su exposición al canal multimarca. “La tendencia ha sido a una paulatina reducción del canal en los últimos años pero, paradójicamente, el cliente pequeño está mejor que en febrero de 2020 -explica-; y el que está en poblaciones pequeñas y medianas, mejor todavía”.

Igor está presente en una red de más de mil puntos de ventas en España y más de 1.500 más en cincuenta mercados en el extranjero, que aportan ya más del 50% de la facturación. “Este verano, Reino Unido va a ser nuestro segundo mayor mercado”, adelanta Altolaguirre.

La empresa genera el 8% de su facturación a través del canal online, que se ha acelerado con la pandemia

“Con sandalias en infantil llevamos seis temporadas muy buenas y este ha sido el año de la explosión, con más de 100.000 pares vendidos”, apunta. La empresa opera en el mercado británico desde hace siete años de la mano de un distribuidor.

En global, la compañía prevé que el verano recupere los niveles de 2019 y que el invierno vuelva a ser de récord. “Si hemos aprendido algo con la pandemia es que hacer presupuestos sirve para equivocarte, pero no contemplamos un incremento menor del 15%”, anticipa.

El canal online representa por el momento un 8% de la facturación, aunque se ha acelerado mucho durante la pandemia. El retail no forma parte de los planes de Igor debido a la estacionalidad de su producto, aunque no descarta explorar el canal a medio plazo a través de tiendas efímeras.

La empresa, fundada en 1974 y con sede en Almoradí (Alicante), emplea a una media de 105 personas y prevé llegar a 120 empleados de media en 2021.