Kling reactiva su expansión tras el concurso para crecer un 20% en 2017

Kling reanuda la marcha tras el concurso y prepara nuevas aperturas para 2017. La compañía, fundada por el empresario Papo Kling, abre una nueva etapa de la mano de los dueños del operador logístico Logisfashion, que rescataron la empresa de los juzgados a finales de 2016. Ahora, la cadena de moda prepara una nueva batería de aperturas, focalizada sobre todo en El Corte Inglés.

“En este momento, el objetivo inicial es consolidar la marca en España, donde sigue funcionando bien”, explica Papo Kling a Modaes.es. “Por suerte, el concurso no ha hecho mella en la imagen, porque fue un bache financiero y pudimos mantener la venta con normalidad, llevando el producto a tienda”, asegura el empresario. “Fueron ejercicios difíciles, pero logramos mantener el ritmo de la gestión diaria”, añade.

La compañía, que encaró un proceso concursal con pérdidas de 1,3 millones de euros y una deuda a corto y largo plazo de 1,2 millones de euros, ha logrado superar el bache con una inyección de 700.000 euros que aportaron sus nuevos socios. La cadena opera ahora bajo la nueva sociedad Wearekling, que controlan los nuevos inversores. No obstante, el fundador de la compañía se mantiene al frente.

Kling contempla la puesta en marcha de cinco corners más en El Corte Inglés y la apertura de una nueva tienda en el primer semestre de 2017

A su salida de los juzgados, Kling no parte de cero. La empresa mantiene una red de tiendas compuesta por nueve establecimientos y catorce corners en El Corte Inglés, y una plantilla de 25 personas, además del personal de los puntos de venta. La compañía, que cerró 2016 con una cifra de negocio de cinco millones de euros, ha trazado una nueva hoja de ruta para reactivar su expansión con miras a crecer un 20% en 2017.

En esta nueva etapa, Kling mantiene su apuesta por el retail y continúa descartando el multimarca o el régimen de franquicia para acelerar su crecimiento. Sus próximos pasos para el primer semestre de 2017 se centrarán en la apertura de cinco corners más en El Corte Inglés y un nuevo establecimiento en el mercado español. Para esta próxima apertura, la compañía analiza aún Bilbao o Valencia.

La nueva empresa ha reforzado el equipo directivo con el fichaje de un nuevo ejecutivo financiero, pero, según explica su fundador, el resto de las operaciones tienen una clara voluntad continuista. En este sentido, Kling conserva su equipo creativo de la anterior etapa, por ejemplo. “Uno de los intereses de nuestros accionistas es que profundicemos en lo que estábamos haciendo, porque nunca dejamos de vender”, explica el empresario.

La empresa cerró 2016 con ventas de cinco millones de euros y espera elevar un 20% su crecimiento este año

Por el momento, en este nuevo arranque, Kling repliega sus operaciones en el extranjero para centrar su actividad en el mercado español. El fundador de la empresa explica que las tiendas que en su día pusieron en marcha en el exterior tenían un buen volumen de ventas, pero no lograron alcanzar la rentabilidad.

Nuevos dueños, nueva etapa

Un grupo de inversores liderado por dos de los cofundadores de Logisfashion (Juan Manzanedo, su consejero delegado, y Juan Martínez) y socios del bufete catalán Baker&McKenzie, responsable de gestionar esta operación, compraron la marca de moda y crearon una nueva sociedad para su gestión.

“Conocíamos la marca y a su fundador porque era cliente nuestro y nos parecía que habían creado algo diferente, con alma, y era una pena se perdiera por un problema puntual de tesorería”, explicó Manzanedo en el momento de la compra. “Así que, con un grupo de amigos, decidimos apostar por el proyecto y darle una segunda oportunidad”, ha apuntado.

Con esta operación, Kling abandonó los juzgados un año y medio después de que la antigua sociedad que controlaba la marca, Kalessa Accesorios solicitara concurso voluntario de acreedores. En la actualidad, esta sociedad prosigue su proceso de liquidación.