Mascaró gana músculo en el extranjero: lleva Pretty Ballerinas a Guatemala, Bolivia y Azerbaiyán

Mascaró sigue mimando a Pretty Ballerinas. El grupo menorquín de calzado, uno de los más grandes de España por cifra de negocio, continúa conquistando nuevos mercados con su cadena más joven. A finales del año pasado, Pretty Ballerinas puso una pica en Azerbaiyán, Guatemala y Bolivia, y su plan de cara a 2017 pasa por abrir nuevos mercados como Costa de Marfil y continuar creciendo en Asia, Oriente Medio y Australia con nuevas aperturas.

Pretty Ballerinas se ha convertido en la punta de lanza de Grupo Mascaró, que opera además con las marcas Úrsula Mascaró y Mascaró. El retail y el desarrollo internacional son dos de los ejes de la expansión de la cadena de bailarinas, que ya cuenta con cien tiendas en una veintena de mercados en todo el mundo. En su conjunto, el grupo culminó 2015 con una facturación de 57 millones de euros. A falta de conocerse los datos consolidados de 2016, la empresa produjo 538.000 pares de zapatos y generó el 70% de su facturación en el extranjero.

Uno de los mercados estratégicos para el grupo es Latinoamérica. A finales del año pasado, Pretty Ballerinas abrió su primera tienda en Guatemala y Bolivia, subió la persiana de su segundo establecimiento en Colombia y abrió el tercero en el mercado chileno.

“En Chile, Pretty Ballerinas funciona muy bien, y no descartamos llevar también Úrsula Mascaró”, asegura David Bell, director de expansión de Grupo Mascaró, a Modaes.es. “En Latinoamérica, hay muchos eventos sociales a los que las mujeres utilizan tacón, a diferencia de Europa, donde se ha impuesto más la cultura de las sneakers”, explica el ejecutivo.

En el punto de mira, la empresa tiene también en el punto de mira otros mercados como Uruguay, Argentina, Paraguay, Costa Rica o República Dominicana, donde trabaja de la mano de un socio local para explorar posibles aperturas.

La empresa prevé llevar también Úrsula Mascaró a Chile, donde Pretty Ballerinas cuenta con tres establecimientos

El buen desarrollo del mercado latinoamericano ha sido clave para otro de los proyectos estrella de Pretty Ballerinas para este año: la apertura de su primera tienda en Miami. El establecimiento subirá la persiana en el centro comercial Aventura Mall, el tercero mayor de Estados Unidos. “A diferencia de en Nueva York, en Miami el tráfico es constante todo el año: en verano, la gente de las zonas frías llega a buscar el calor, mientras que en invierno llegan viajeros del sur buscando un clima más templado”, explica Bell.

La de Miami será la quinta tienda de Pretty Ballerinas en el mercado estadounidense, y pretende servir de bisagra para dar a conocer la marca en el país y en Latinoamérica, donde ya opera con una decena de establecimientos.

Por su parte, en el mercado asiático, los planes de Mascaró  pasan por continuar reforzando la comunicación de la marca en China y poner en marcha un segundo establecimiento en Singapur. La empresa abrirá en la misma calle donde ya abrió su primer establecimiento: Orchard Road. “En la misma calle hay tres zonas de comercio muy diferenciadas y cuatro centros comerciales con un tráfico distinto; para que se haga una idea, Louis Vuitton tiene cuatro tiendas en la misma vía”, dice Bell.

En Europa y Oriente Medio, además de continuar reforzando los mercados donde ya opera, Pretty Ballerinas acaba de abrir su primera tienda en Azerbayán y la segunda en Líbano, y prepara nuevas aperturas en Melburne (Australia) e Israel.

África, última frontera

Entre los mercados que todavía le quedan por conquistar a Pretty Ballerinas figura África. “Es un mercado con mucho potencial”, subraya Bell. La empresa ya cuenta con presencia en Sudáfrica y, de cara a este año, prepara su entrada en Costa de Marfil.

El país, aunque poco explorado por las compañías occidentales de moda, tiene una economía pujante y una gran población joven (la media de edad es de 20,7 años). El grupo de calzado Bata abrió su primera tienda en Costa de Marfil en 2014, y Decathlon desembarcó en el mercado el año pasado con su primera tienda en Abiyán, capital financiera y comercial del país.

También la moda española tiene una representación moderada en Costa de Marfil: Mango opera con dos tiendas en dos centros comerciales en la capital y Desigual opera en una tienda multimarca local, también en Abiyán. En cambio, ni Inditex ni Grupo Cortefiel tienen presencia todavía en Costa de Marfil.