Twin&Chic sale al mercado en busca de accionistas para financiar su nueva fase de crecimiento

La empresa de moda infantil Twin&Chic sale al mercado en busca de nuevos accionistas de referencia. La compañía vasca, especializada en moda infantil dermosaludable y ecológica, se ha marcado el objetivo de captar un mínimo de 350.000 euros en la que será su tercera ronda de financiación. En paralelo a un proceso de crowdfunding, la empresa negocia con family offices y business angels españoles e internacionales para que se incorporen al capital como accionistas de referencia. Con los fondos, Twin&Chic financiará la investigación científica y médica asociada a su producto y su plan de expansión, según ha explicado Érika Gómez, fundadora de la empresa, a Modaes.

Con sede en San Sebastián, Twin&Chic concentra su distribución en el canal multimarca y en cuatro corners de gestión propia en El Corte Inglés. Con una plantilla de diez personas, Twin&Chic finalizó el ejercicio 2023 (concluido el pasado 31 de marzo) con una cifra de negocio de 474.000 euros y tiene como objetivo alcanzar los 500.000 euros en 2024. En 2023, con perímetros temporales comparables pues la empresa modificó la fecha de cierre del ejercicio, el crecimiento fue del 30%.

El capital de la empresa se reparte actualmente entre cincuenta socios, ninguno de los cuales tiene una participación destacada, si bien entre los accionistas figuran directivos como Carlos Yáñez, socio de Geiser Pharma. La compañía cuenta con un consejo de administración en el que figuran Yáñez, Luis Lara (consultor) y Juanjo Azkárate (Womenalia), y un consejo científico formado por Javier Sardina, Carmen D’amelio y Gustavo Pego.

La empresa ha cerrado ya dos rondas de financiación, ambas a través de crowdfunding: la primera, en 2020, permitió a la empresa captar 150.000 euros y la segunda, en 2022, más de 600.000 euros. La tercera ronda debería tiene su cierre previsto para julio, pero Gómez advierte que se ampliará el plazo a septiembre para cerrar acuerdos con inversores profesionales.

Twin&Chic financiará la investigación científica y médica asociada a su producto y su plan de expansión

Trayectoria

Twin&Chic inició su desarrollo en 2018 de la mano de Érika Gómez, que hoy en día ya no controla la mayoría del capital de la compañía pero sigue dirigiéndola. La marca infantil, que compite con firmas de posicionamiento elevado como Bonpoint, nació con el objetivo de crear prendas que no dañen la piel de los niños como elemento diferenciador. “Las clientas nos compran por el diseño y la estética de las prendas, lo primero, pero nos diferenciamos con la dermosalud”, explica Gómez.

“La industria de la moda se está preocupando de la descarbonización y la economía circular, pero no de la salud -reflexiona-; es normal, hay que tener prioridades, pero la nuestra es esta”. En 2020, tras la pandemia, la empresa decidió llevar al extremo su posicionamiento e inició un proceso de investigación científica que duró un año y medio para definir qué es una prenda dermosaludable.

De la mano de médicos alergólogos y químicos especializados en salud y seguridad del producto de Clínica Universidad de Navarra y la Universidad de Santiago de Compostela, Twin&Chic definió requisitos a cumplir en cinco áreas para sus prendas: materiales permitidos, prohibición de ciertas sustancias químicas, restricción de uso de determinados compuestos, PH y solidez de color y restricciones de diseño.

La empresa cuenta con un consejo de administración y un consejo científico

Tras completar el proceso de investigación, la empresa comenzó a poner en el mercado las primeras prendas que cumplían todos los requisitos de salud, además de contar con certificados de agricultura y ganadería ecológica para las materias primas. La confección se divide entre Portugal y España.

“Vamos más lentos que otras marcas porque en todos los pasos que damos tenemos que asegurar que las características de salud se cumplen; no podemos hacer nada que no esté avalado por médicos”, señala Gómez.

Nueva fase de crecimiento

El crecimiento de Twin&Chic, con el que aspira a llegar a una facturación de 800.000 euros que permita alcanzar el punto de equilibrio, pasa por la diversificación de producto, la apertura de una tienda propia en Madrid que sirva de modelo para franquiciar, el desarrollo de la plataforma online y el crecimiento internacional, con México, Oriente Próximo y Estados Unidos.

La diversificación de producto requiere una alta inversión porque supone desarrollar los mismos estándares médicos y químicos que con las prendas textiles, con un mínimo de un año de investigación científica.

La empresa se ha marcado el objetivo de introducirse en los segmentos de cosmética infantil, moda de baño y calzado. En los tres casos, ya está en negociaciones con compañías especialistas en estos ámbitos para desarrollar la investigación de forma conjunta.