Tres años de crecimiento en uno: cómo la pandemia catapultó el ecommerce de moda
La ropa se colocó como el artículo o servicio más comprado a través de Internet en España, con unas ventas que superaron los 4.000 millones de euros.
5 jul 2021 - 04:44
Pocas afirmaciones se han repetido menos en el último año como la de que la pandemia ha acelerado la digitalización del sector de la moda. Aunque el acelerón comenzó por necesidad, por el cierre forzado de tiendas y los confinamientos perimetrales, la subida se ha mantenido e incluso acelerado en la recta final del año. En doce meses, la moda ha incrementado su negocio online en España en el mismo volumen que en los tres años anteriores.
Las ventas de ropa a través de la red ascendieron el año pasado a 4.331 millones de euros, lo que supone un incremento de 1.398 millones de euros. El alza en términos absolutos supera con mucho los 359 millones que se sumaron en 2017; los 452 millones de 2018 e incluso los 662 millones de 2019, que fue un año de récord.
En términos relativos, la subida fue de casi el 50%, la mayor desde que hay datos disponibles comparables en la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (Cnmc): en 2017, el ecommerce de ropa rebotó un 24,6%, en 2018 subió otro 24,9%, y en 2019 se catapultó un 29,1%.
El aumento estuvo motivado por el crecimiento de las transacciones que más aportan al ecommerce de ropa en el país: las realizadas de España con el exterior. Las ventas en esta dirección se catapultaron un 56,1%, hasta 2.841 millones de euros.
Las realizadas por españoles a plataformas españolas, las segundas por volumen, se incrementaron un 35,1%, hasta rozar los mil millones de euros, mientras que las realizadas del exterior con España también crecieron por debajo del conjunto del ecommerce de moda, con un alza del 31,8%, hasta 502,9 millones de euros.
La tendencia se repite, pero de forma todavía más exagerada, en la evolución de las transacciones, que se dispararon un 59,6%, hasta 67,6 millones de operaciones, lo que supone que el incremento del negocio estuvo motivado porque se compró moda más a menudo por Internet, y no porque aumentara el gasto por transacción.
En sólo un año, se registraron 25,4 millones de operaciones más que el año anterior, aupadas muy probablemente por la incorporación de nuevos compradores, aunque también por el aumento de la frecuencia de los que ya compraban. En cada ejercicio de los tres años anteriores, las transacciones apenas se habían incrementado en siete millones.
Cada cien euros gastados en total en Internet, más de ocho fueron para algún producto de moda, el máximo histórico y dos puntos más que en 2019. Sólo en el cuarto trimestre (que incluye el Black Friday y la campaña navideña), el peso de la moda sobre el conjunto del ecommerce en España se catapultó hasta el 9,8%, coronando de nuevo el ránking de productos y servicios más vendidos a través de la Red.
Le siguieron, con una cuota muy inferior, del 5,1%, la suscripción a canales de televisión; los juegos de azar y de apuestas, con un 4,9%; los hipermercados, supermercados y tiendas de alimentación, con un 3,8%, y la administración pública, impuestos y Seguridad Social, con un 3,5%.