New Blanco echa a andar con medio millón de inversión y busca local en Barcelona

New Blanco da sus primeros pasos. La compañía, impulsada por el empresario Jordi Hidalgo con el apoyo de ex trabajadores de la cadena madrileña, ha invertido medio millón de euros para comenzar su andadura, que se materializará este mes con la apertura de su primera tienda en Murcia. La empresa prevé finalizar 2017 con una red de 32 tiendas y ya ha comenzado a buscar locales en Barcelona.

El primer establecimiento de New Blanco subirá la persiana en el centro comercial Dos Mares, en San Javier (Murcia), y tendrá una superficie comercial de 396 metros cuadrados. El equipo de la tienda, unas ocho personas, son todos antiguos trabajadores de Blanco.

El siguiente paso será la puesta en marcha de una tienda de referencia en Barcelona, donde el grupo ultima el alquiler de un local que superará los 800 metros cuadrados de superficie. A corto plazo, la empresa prevé alcanzar los 32 puntos de venta en España y Portugal.

Todas ellas serán, por el momento, tiendas propias, aunque para financiar su expansión Hidalgo espera que, tras la apertura de la primera tienda, más trabajadores de Blanco se sumen al proyecto.

La compañía ya cuenta con el apoyo de un centenar de socios, la mayoría ex empleados de Blanco

New Blanco opera en régimen de cooperativa, donde participan medio centenar de asociados, la mayoría ex empleados de la cadena. Además, la empresa cuenta, según Hidalgo, con dos sociedades. La principal de ellas es New Look Blanco, que se ha constituido con un capital social de 580.000 euros.

La sede de la compañía se encuentra temporalmente instalada en Sant Celoni (Barcelona), en las oficinas del grupo Hipaldisa, propiedad de Hidalgo. El pasado mayo, el grupo registró su logotipo, muy similar al de la desaparecida Blanco.

Blanco echó definitivamente el cierre el pasado marzo, cuando bajó la persiana de su última tienda, en el centro comercial Xanadú, después de 57 años de actividad. 

La compañía presentó su liquidación en diciembre de 2016, tras fracasar en la búsqueda de un inversor. Blanco estaba entonces en manos del fondo AC Modus, a quien se lo había traspasado Alhokair apenas unos meses antes de entrar en los juzgados por segunda vez.