Tapestry rearma la cúpula de Coach y apuesta por talento interno para liderar la marca
Todd Kahn, que ha ocupado la dirección de Coach de forma interina desde el pasado julio, ha sido la opción del grupo para permanecer al frente de la empresa.
15 abr 2021 - 13:17
Tapestry confía en talento de la casa para liderar Coach. El grupo estadounidense ha nombrado a Todd Kahn como nuevo consejero delegado de empresa y presidente de marca, según ha explicado en un comunicado. Kahn ejercía el cargo de forma interina desde el pasado julio, tras la salida de Joshua Schulman.
El ejecutivo se incorporó al grupo en enero de 2008 y ha ocupado distintos cargos de responsabilidad en la empresa, especialmente en el departamento legal, que llegó a liderar antes de asumir las riendas de Coach.
Tapestry explica que “tras una extensa búsqueda” ha optado por Khan por el “increíble trabajo que ha hecho liderando Coach en los últimos nueve meses, produciendo excepcionales resultados al tiempo que gestionaba el entorno de pandemia”.
Además, el grupo destaca que durante sus trece años en la empresa, el ejecutivo ha sido “clave a la hora de diseñar nuestra agenda estratégica”. Khan reportará a Joanne Crevoiserat, consejera delegada de Tapestry desde el año pasado.
Tapestry ha colocado a Todd Kahn al frente de su mayor marca, que aporta un 71% de las ventas
Crevoiserat reemplazó a su vez a Jide Zeitlin, que dejó la empresa por motivos personales tras haber renovado por tres años su contrato en marzo. Inicialmente, la ejecutiva asumió su relevo de forma interina.
El conglomerado, con sede en Nueva York, opera con las marcas Coach, Kate Spade y Stuart Weitzman. La empresa cotiza en la bolsa de Nueva York y se construyó con compras a partir de Coach, fundada en 1941.
Tapestry cerró su último ejercicio (finalizado en junio de 2020) con una facturación de 4.961,4 millones de dólares, un 17,6% menos que el año anterior. La empresa entró en pérdidas, con unos números rojos de 652,1 millones de dólares, debido al impacto que supuso la pandemia.
Coach es, con diferencia, la marca que más aporta al grupo, con unos ingresos de 3.526 millones de dólares en el último ejercicio, lo que supone un 71% del total. Por su parte, Kate Spade representa un 23% y Stuart Weitzman, un 6%.