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Los motores ‘next gen’: el algodón trazable de Materra que ya está en la ropa de H&M y Mango

La compañía, fundada en 2018, permite a las empresas de moda introducir un algodón producido de manera sostenible en sus cadenas de suministro sin tener que crear su propio sistema desde cero y con completa trazabilidad.

Los motores ‘next gen’: el algodón trazable de Materra que ya está en la ropa de H&M y Mango
Los motores ‘next gen’: el algodón trazable de Materra que ya está en la ropa de H&M y Mango
Materra opera a través de esta red de granjas locales en las que impulsa dos modelos sistemas de agricultura sostenibles diferentes.

Celia Oliveras

10 may 2024 - 05:00

Materiales textiles de nueva generación. De todo tipo (algodón, viscosa o poliéster, por ejemplo) y procesados de diferentes formas (reciclaje mecánico y químico). Sean cómo sean, todos comparten que son la gran esperanza de la industria de la moda en el camino a la sostenibilidad. De Seaqual a Infinited Fiber, pasando por Spinnova, ¿cuáles son los motores next gen del sector y a qué retos se enfrentan?

 

Los motores next gen: la llave de la moda

 

Nombre: Materra

Fundación: 2018

Sede: Londres e India

Accionistas: H&M, Bestseller, PDS Limited

Finalidad: Algodón sostenible

 

 

Con el objetivo de conectar el top y el bottom de la moda nació Materra, una compañía dedicada a la producción de algodón sostenible y la “transparencia radical” a lo largo de toda la cadena de valor. El proyecto, que dio sus primeros pasos en 2018 de la mano de tres estudiantes británicos, ya ha conseguido introducir su algodón en las colecciones de gigantes del sector como Mango, H&M y Kering.

 

Materra comenzó su recorrido en 2018 de la mano de Edward Brial, Edward Hill y John Bertolaso, tres graduados en Diseño e Ingeniería de Innovación. Cuatro años más tarde, dieron entrada al capital a H&M y el grupo danés Bestseller, tras abrir una ronda de financiación por valor de 4,5 millones de euros. Los tres fundadores todavía mantienen la mayor parte del capital.

 

“Nuestro objetivo es hacer cambios en la cadena de valor de la moda -explica Edward Brial, consejero delegado y uno de los fundadores de Materra, a Modaes-; y para ello es necesario crear una relación entre la parte inferior y superior de la cadena de producción”.

Para ello, la compañía con sede en Londres quiere visibilizar la red de más de 1.000 agricultores con los que trabaja, principalmente en la zona de Gujarat (India) y ayudarles a firmar contratos a largo plazo con las marcas del sector. Esto permite, además, que las empresas de moda comiencen a utilizar algodón sostenible en su cadena de valor, sin tener que construir esta desde cero.

Desde que la compañía comenzó a funcionar en 2018, ya ha conseguido generar unas ganancias “modestas”, y aunque Brial no ha querido compartir la cifra exacta, asegura que la compañía ya genera beneficios.

 

Materra opera a través de esta red de granjas locales en las que impulsa dos modelos sistemas de agricultura sostenibles diferentes. El primero es un modelo de agricultura hidropónica, a través del cual se produce un algodón premium con una fibra más larga, más difícil de cultivas en grandes cantidades, y que, además, no utiliza tanta cantidad de agua y productos químicos en el proceso.

 

La tecnología desarrollada por la compañía ha conseguido crear un algodón “resistente al clima” lo que permite a los agricultores cultivar en zonas donde ya no era posible hacerlo, tanto por las condiciones climáticas como del propio terreno, que en muchas regiones de la India ya está sobre explotado. Para conseguir esta fórmula, la empresa del algodón llevó a cabo tres ensayos en su centro de pruebas de Essex (Reino Unido).

 

El segundo sistema se basa en impulsar la agricultura regenerativa, un tipo de agricultura mucho más extendida en el mundo y que permite también reducir un 30% la cantidad de químicos utilizados en el proceso de producción del algodón, un 80% la del agua y mejorar la calidad de vida de los agricultores.

 

A pesar de que ambos sistemas están igual de integrados en la red de colaboradores de Materra, y suponen la mitad del volumen total en ambos casos, Brial destaca la escalabilidad del segundo método. “Nuestro objetivo es conseguir elevar la producción de algodón regenerativo en los próximos años, y llegar a generar un impacto positivo en un mayor número de agricultores y sus familias”, asegura el cofundador.

 

 

A corto plazo, el principal objetivo de Materra es invertir en la mejora de su software para simplificar su funcionamiento, lo que ayudaría a los agricultores y elevaría la trazabilidad del producto. La compañía, que trabaja constantemente entre Londres e India, está en contacto directo con su red de granjas a través de la aplicación Co:Farm, que permite a los agricultores acceder a programas de formación y datos en tiempo real.

 

Por otro lado, el uso principal de esta herramienta es que los agricultores puedan introducir la información sobre sus cosechas y cultivos. Una vez su fibra está en el mercado, las empresas y clientes pueden identificar todas las etapas por las que ha pasado el material, lo que garantiza una completa transparencia y trazabilidad.

 

“Cada vez hay más marcas interesadas en el algodón de nuestros agricultores asociados, porque saben que el peligro de no ser transparentes es muy elevado”, relata Brial. La última incorporación a la cartera de clientes de Materra es la catalana Mango, que el año pasado anunció que comenzaría a incorporar el algodón de la compañía en sus primeras colecciones de 2024.

La plataforma de Materra permite extraer indicadores como la fertilidad, la salud del suelo, el uso de agua y pesticidas o el tamaño de la parcela utilizada, que suele rondar entre una y cinco hectáreas.

 

La propuesta de Materra también ha llamado la atención a otros gigantes del sector como el grupo Kering o PVH, que también han introducido el algodón sostenible de Materra en sus colecciones. El gigante sueco H&M, el rey de los básicos y que basa en algodón gran parte de sus prendas, forma parte de la cartera de Materra, a la vez que participa en el capital de la compañía.

 

Los métodos de cultivo que usan los agricultores asociados con Materra no encarecen el precio del producto. Sin embargo, tal y como explica Brial, el precio a pagar es ligeramente más elevado debido a los gastos en los programas de formación para los agricultores, los incentivos que se pagan a estos y el márketing que lleva a cabo la empresa.