Los motores ‘next gen’: Syre, la apuesta de H&M para escalar el reciclaje químico
La empresa, que tiene como socio principal al grupo sueco H&M, tiene el objetivo de escalar el reciclaje químico de poliéster a gran escala. A largo plazo, además, prevé generar tres millones de toneladas de fibra al año.
28 mar 2024 - 05:00
Materiales textiles de nueva generación. De todo tipo (algodón, viscosa o poliéster, por ejemplo) y procesados de diferentes formas (reciclaje mecánico y químico). Sean cómo sean, todos comparten que son la gran esperanza de la industria de la moda en el camino a la sostenibilidad. De Seaqual a Infinited Fiber, pasando por Spinnova, ¿cuáles son los motores next gen del sector y a qué retos se enfrentan?
Los motores next gen: la llave de la moda
Nombre: Syre
Fundación: 2024
Sede: Estocolmo (Suecia)
Accionistas: H&M, Vargas Holdings y TPG Rise Climate
Finalidad: Fibra de poliéster reciclada
Si el reciclaje textil a textil es el gran desafío y, a la vez, una de las grandes aspiraciones de la moda, conseguir escalar el reciclaje químico es la joya de la corona del sector. Y ese es precisamente el objetivo que se ha propuesto Syre, la última compañía en llegar a un sector cada vez más relevante pero todavía protagonizado por pequeñas empresas que no son capaces que dar respuesta a la creciente demanda de las marcas. Sus planes ya han seducido a un gigante de la moda: H&M.
A pesar de que el proyecto se acaba de hacer público, Syre nació en la sobra hace dos años y medio. “Somos una empresa de impacto textil que descarboniza la industria mediante el reciclaje de textil a textil -rezan las primeras palabras de su página web-; a hiper escala”, añade el mensaje. Para ello, Syre ha trazado un plan de crecimiento que contempla la apertura de dos primeras grandes fábricas en los próximos dos años, que tendrán la capacidad de generar 250.000 toneladas de fibra reciclada.
Concretamente, Syre ha pasado dos años desarrollando una tecnología capaz de reciclar poliéster procedente de residuos textiles hasta conseguir una fibra de suficiente calidad como para volver a formar nuevas prendas. A pesar de que esto no es una novedad en la industria, el volumen al que planea hacerlo Syre sí lo es.
Syre ha trazado un plan de crecimiento que contempla la apertura de dos primeras grandes fábricas en los próximos dos años
“Hemos escogido la tecnología más fácil para escalar, en un proceso en el que además no necesitamos utilizar grandes cantidades de agua, lo que reduce el impacto tanto económico como medioambiental”, ha explicado el consejero delegado de Syre, Dennis Nobelius, a Modaes. Concretamente, la compañía prevé que la primera planta, que ya ha comenzado a funcionar en Carolina del Norte (Estados Unidos), produzca 10.000 toneladas de fibra para 2024.
Esta fábrica, sin embargo, es la primera prueba piloto de la compañía, y ha dado el pistoletazo de salida a una hoja de ruta por la que la empresa espera alcanzar una cartera de doce plantas en 2032, que tendrán una capacidad conjunta de producir tres millones de toneladas de fibra al año.
“La planta de Estados Unidos está dedicada a una producción comercial más reducida, pero es el prototipo que después nos permitirá funcionar a gran escala”, especifica Nobelius.
A medio plazo, Syre comenzará la producción industrial de su fibra en dos primeras plantas, que han supuesto una inversión de 500 millones de dólares cada una. A pesar de que la localización todavía no está decidida (las opciones que se plantean van desde un país del sudeste asiático o, incluso, España o Portugal), la compañía prevé abrir una primera fábrica en 2026, que ya será capaz de producir 250.000 toneladas. La tercera planta de la compañía está previsto que comience a funcionar en 2027.
La aparición de Syre se produce en un momento en el que muchas marcas, como la propia H&M, necesitan abastecerse de una gran cantidad de fibras de material reciclado
Para ello, Syre ha contado con una inversión inicial de un gigante de la moda como es H&M y el fondo de inversión Vargas Holding, por valor de 600 millones de euros en un plazo de siete años. El proyecto también ha contado con el respaldo del fondo de inversión TPG Rise Climate, que ha aportado 50 millones de euros, más otros diez millones de euros adicionales de otros pequeños inversores.
De cara al futuro, sin embargo, Nobelius ha asegurado que la empresa está abierta a buscar nuevos socios dentro del sector del sorting y el sourcing y “colaborar con empresas que estén interesadas en escalar su producción de fibra reciclada”. Además, el material cuya tecnología es capaz de reciclar actualmente está compuesto en un 90% de poliéster, aunque en el futuro prevén llegar hasta un 60% y 70%.
La aparición de Syre se produce en un momento en el que muchas marcas, como la propia H&M, necesitan abastecerse de una gran cantidad de fibras de material reciclado para cumplir con los objetivos que se han marcado de cara a 2030. La quiebra de Renewcell, la que era una de las esperanzas del sector de la moda, sin embargo, ha puesto en peligro este abastecimiento.
La empresa está abierta a buscar nuevos socios dentro del sector del sorting y el sourcing
“Renewcell fueron unos pioneros, pero reconocemos las diferencias que tenemos con ellos en muchos aspectos”, asegura Nobelius respecto al futuro de Syre. El ejecutivo, de hecho, distancia la compañía de Renewcell en tres aspectos. El primero y más importante, según Nobelius, es la estructura de Syre, que al contrario que Renewcell, no cotiza en Bolsa, lo que aporta una seguridad a su actividad y permitirá a la compañía comenzar a ser rentable sin la presión del parqué.
Además, el tipo de fibra que recicla la compañía, el poliéster, le da una ventaja respecto al algodón y la viscosa que reciclaba Renewcell, tanto por el volumen de prendas que hay en el mercado de este material como por los procesos que comportan ambos. Nobelius también destaca que Syre planea expandir su cartera de clientes a sectores más allá de la moda, como el automovilístico y la decoración, lo que abre otros mercados para escalar la fibra.
Respecto a sus posibles clientes, la compañía no ha compartido ninguno de los nombres con los que ha comenzado o prevé comenzar a trabajar, aparte del gigante sueco, pero asegura Nobelius que ha tenido conversaciones con muchos de los gigantes del sector, entre los que se podría encontrar, por ejemplo, Inditex.