Praedium reordena la cúpula de Nylstar en plena reorientación del negocio hacia el retail
18 abr 2016 - 04:57
Praedium reordena la cúpula de Nylstar. El grupo inversor pierde al director general de la empresa de hilatura, Zigor Kortazar. El directivo sale de la compañía después de tres años en el cargo y en el transcurso de un expediente de regulación de empleo (ERE) temporal que afecta a la práctica totalidad de la plantilla de la empresa. La marcha de Kortazar, que abandona el grupo para acometer nuevos proyectos profesionales, coincide además con un giro estratégico de la actividad de la empresa hacia el retail y la explotación de la marca Meryl hacia el consumidor final.
En manos del empresario Alfons Cirera desde 2011, Nylstar incorporó a Kortazar en julio de 2013 después de hacerse con el control de la marca Meryl, de hilo de nylon, para su explotación en todo el mundo. A raíz de aquella operación, Praedium redefinió el negocio de la compañía con el propósito de desarrollarlo para abordar toda la cadena de valor industrial.
Así, el grupo industrial, fundado en 1923, dejó de ceñir su actividad a la producción de hilo para ampliarla a la tejeduría y la confección. Asumirá sus funciones en el cargo el actual consejero delegado de Nylstar Fashion Group y socio de Praedium, Juan Miquel Joaquim Nicolau.
Praedium pierde al director general de Nylstar en plena reorientación del negocio y en el marco de un Erte sobre la práctica totalidad de la plantilla
Junto con Kortazar, abandona también la compañía Raimon Pagès, ex director de operaciones de Dogi. Pagès se incorporó a Nylstar en febrero de 2015 con la función de abordar la nueva área de producción de tejidos y prendas. Ambas salidas responden a la nueva reorientación estratégica de la compañía, que quiere reducir su peso industrial para impulsar un enfoque comercial e introducirse en el ámbito de la distribución minorista, según han explicado fuentes de la empresa.
En el marco de esta nueva reorientación, Nylstar está prescindiendo de perfiles “muy buenos” en el ámbito industrial, pero que no encajan en la nueva estrategia de la empresa. Por otro lado, desde el pasado enero, se ha incorporado al grupo Carlos Maíz, ex directivo de Desigual. El ejecutivo es el nuevo director general de Meryl.
Estos movimientos tienen lugar mientras transcurre el ERE temporal que la empresa presentó el pasado marzo sobre 175 trabajadores y que concluye a mediados de julio. Este expediente paralizará la producción de la compañía durante los cuatro meses. Nylstar explicó que esta medida era consecuencia de un problema técnico con la caldera de gas, que afectaba al suministro eléctrico de la planta, y avanzó que aprovecharía este parón para realizar modificaciones en la planta y la reordenación del trabajo.
De Nylstar también ha salido Raimon Pagès, ex director de operaciones de Dogi, que se incorporó a la empresa para abordar la nueva área textil
A mediados de febrero, Alfons Cirera, presidente del Praedium, aseguró que el parón se debía a un exceso de stock y a una planificación estratégica del grupo para reorientar su fabricación al segmento del lujo y concentrar la actividad a los procesos de estirado y acabado.
Por otro lado, Praedium ha iniciado ya las labores de puesta a punto para la planta de Montefibre, en la localidad burgalesa de Miranda de Ebro. A punto de cumplirse tres años de su cierre, unos cuarenta operarios han empezado a trabajar en la factoría, aunque todavía no ha empezado a producir, según han explicado fuentes sindicales.
Montefibre es propietaria de la marca de hilo de acrílico Leacril, con la que su nuevo propietario planea reproducir la misma fórmula que ha llevado a cabo con Meryl en Nylstar.