Gilles Lasbordes (Première Vision): “Las ferias estaban en cuestión, pero la crisis ha demostrado lo necesarias que son”

Gilles Lasbordes, director general de Première Vision. Fotografía: Stéphane Kossmann

París está desierto. Con las tiendas y restaurantes cerrados y lo que él denomina un “confinamiento light”, Gilles Lasbordes y su equipo han tenido que dibujar el futuro a corto plazo de la mayor feria de tejidos de París, Première Vision. El director general del salón reconoce que la incertidumbre todavía es mayúscula, pero asegura que la pandemia ha puesto de manifiesto que la moda necesita verse las caras. “Las ferias estaban en cuestión, pero cuando no hubo ferias, todo el mundo las ha echado de menos”, dice el ejecutivo. Otro factor que, en su opinión, es positivo para el formato es el avance de la sostenibilidad. “Exige corresponsabilidad con el productor, y eso es bueno para las ferias”.

Pregunta: ¿Qué han aprendido de sus dos primeras convocatorias totalmente digitales?

Respuesta: Mucho. Los datos de asistencia han mejorado de septiembre a febrero y vemos que el formato digital puede ser una muy buena herramienta de apoyo para el márketing de los expositores. Tenemos una gran base de datos de compradores y tenemos la oportunidad de usarlas. Aun así, pensamos que lo mejor es tener ambas, porque verse es una necesidad en la industria.

P.: En Italia, Pitti ha estado en conversaciones con el Gobierno para poder volver a realizar eventos físicos. ¿Qué le piden ustedes al Gobierno francés?

R.: Nosotros, y toda la industria, pedimos visibilidad, poder saber cuanto antes el cale      ndario de reapertura, por supuesto manteniendo todas las medidas de seguridad.

P.: Antes de la pandemia, recibían a más de 44.000 visitantes en cada edición. Si se impone el modelo omincanal, ¿volveremos alguna vez a ver esas cifras?

R.: No lo sé. Estamos en un periodo en que es muy difícil hacer previsiones. En septiembre podremos tener algo más visibilidad. Lo que sabemos ahora es que los compradores quieren ir a eventos físicos, están deseando volver a encontrarse. Antes de la pandemia, mucha gente estaba cuestionando el futuro de las ferias, pero la crisis ha demostrado lo necesarias que son. Todo el mundo las ha echado de menos. Esperamos un buen empuje cuando podamos reunirnos, aunque sea limitado.

“La sostenibilidad requiere de una corresponsabilidad con el productor, y eso es bueno para las ferias”

P.: Las marcas tienen todavía stock del año pasado y están recortando compras. ¿Cómo puede esto afectar a las ferias?

R.: La experiencia nos dice que en un periodo de crisis la creatividad vuelve a ser un aspecto fundamental. Los tejedores están siendo extremadamente creativos para apoyar esa necesidad del mercado, y en ese sentido el impacto en las ferias es positivo. Otro aspecto a favor es el aumento de la sostenibilidad, que requiere de una corresponsabilidad con el productor. Hay una mayor necesidad de reunirse con el proveedor para innovar y encontrar soluciones más sostenibles. Es un factor al alza que es bueno para las ferias y está siendo impulsado por el consumidor.

P.: Justo antes de la pandemia publicaron un estudio con el Institut Français de la Mode que apuntaba que las marcas lanzaban cada vez más colecciones simultáneamente. ¿Ha cambiado esto con la pandemia?

R.: Es muy pronto para evaluar lo que está ocurriendo a gran escala. Vemos a algunas marcas que ya han decidido ralentizar el ritmo de lanzamientos, pero otras no. Hay múltiples estrategias, pero la situación en este momento es frenética.

P.: Otro de los resultados de ese estudio era el cambio en el calendario. ¿Esto también quedará atrás?

R.: No. Creemos que los fundamentales de la decisión que tomamos de trasladar a julio la feria continúan ahí. El plan continúa siendo que Première Vision se celebre en julio para las colecciones otoño-invierno y en la primera o segunda semana de febrero para las de primavera-verano. Es una decisión que apoya el cambio de la industria y responde a la demanda de expositores y visitantes.