Alba Rocafort (Fabbric): “Un reto para las mujeres emprendedoras es el acceso a capital”
La cofundadora de la start up Fabbric, especializada en optimizar procesos de diseño y producción de colecciones de moda, hace una radiografía del sector emergente y pone en el punto de mira la figura de la mujer emprendedora.
21 nov 2024 - 05:00
Líneas de financiación específicas para mujeres o más visibilidad y apoyo. Estos son algunos elementos que la cofundadora de la start up Fabbric, Alba Rocafort, describe para fomentar más liderazgo femenino dentro de la cultura emprendedora española. Rocafort hace una radiografía del sector de las empresas emergentes a escala nacional y el papel de los grandes operadores y de las mujeres en esta. Fabbric, por su parte, inició su andadura en febrero de 2021 y en julio del mismo año salió al mercado de la mano de Rocafort y Hugo Cuesta. La emprendedora, consejera delegada de la compañía, es licenciada en Política, Filosofía y Economía por la Universidad de Manchester y cuenta con un MBA por London School of Economics. Antes de emprender, la cofundadora trabajó como consultora en compañías como Santander o Simon-Kucher.
Pregunta: ¿La moda es innovación?
Respuesta: Una start up es innovación y lo que buscan es disrumpir las industrias. Hemos visto ejemplos como Uber disrumpir la industria de transporte o Glovo en la hostelería. Realmente se puede innovar en cualquier industria y previamente eran industrias muy tradicionales, como las que he mencionado, sin ser digitalizadas o nutriéndose de tecnología. En el caso de la moda, vimos que era un sector muy manual, con procesos largos y complejos. Por ello, con Fabbric decidimos conectar moda con tecnología para simplificar el proceso y hacerlo más accesible.
P.: ¿Es necesario un chief innovation officer para que una empresa innove?
R.: No necesariamente, en nuestro caso no ha habido un Chief Innovation Officer, simplemente ha sido una start up y dos personas que han visto una potencia de innovación en una industria e intentando solucionar o simplificar procesos que vimos que se podían innovar.
P.: ¿En qué destacan las start ups españoles del sector? ¿Se debe fomentar más la cultura emprendedora en España?
R.: En los últimos años el ecosistema emprendedor en general de España ha experimentado una gran evolución. Históricamente el país no se consideraba un referente en términos de innovación de start ups, sobre todo con otros mercados europeos más maduros como Alemania, Francia o Reino Unido, pero creo que esta percepción ha cambiado drásticamente. En el caso de start ups de moda, estas han tenido muchos factores que han apoyado este crecimiento como el acceso a financiación, el desarrollo de hubs tecnológicos, mentalidad más abierta hacia la innovación, crecimiento de aceleradoras, eventos de networking... Todo esto ha contribuido a que las start ups cuenten con más recursos para crecer y para nacer, sobre todo también en la industria de la moda.
“En los últimos años el ecosistema emprendedor en general de España ha experimentado una gran evolución”
P.: ¿Qué carencias tiene el sector en España?
R.: En particular la cultura emprendedora en el ámbito femenino, que se debe fomentar más. Aunque el ecosistema está cambiando, uno de los mayores retos para las mujeres emprendedoras continúa siendo el acceso a capital. En muchos estudios se ha demostrado que las start ups fundadas por mujeres tienden a recibir menos financiación que aquellas fundadas por hombres, además hay un poco de falta de representación en los sectores más tecnológicos y en posiciones de liderazgo, esto puede ser por falta de referentes femeninos en los que inspirarse y redes de apoyo menos robustas. Sí que es verdad que existen iniciativas como Female Start up Leaders que están ayudando a reducir esta diferencia, pero la realidad es que los sectores de tecnología y software, por ejemplo, continúan siendo dominadas en gran parte por hombres.
P.: Tras incorporar al capital a Thomas Meyer, fundador de Desigual, ¿qué oportunidades representa para las start ups asociarse con grandes compañías?
R.: En general el asociarse con grandes compañías genera visibilidad y además también genera confianza al usuario, a otros inversores y sobre todo de la industria.
“En momentos iniciales de la start up está muy vinculada al fundador”
P.: ¿Cómo se debe fomentar la cultura femenina?
R.: Con líneas de financiación específicamente para mujeres, como es el caso de Enisa, en su préstamo participativo, y hay una línea especializada para mujeres digitales. Más visibilidad para las mujeres emprendedoras, y que haya más inversoras mujeres. Por suerte, en nuestro caso, aunque yo sea mujer, no me he topado con estas dificultades.
P.: ¿Deben las start ups hacerse menos dependientes del fundador?
R.: En momentos muy iniciales de la start up, sobre todo si hablamos de inversión, el inversor invierte en el fundador, no en la idea, ya que la idea suele adaptarse y va creciendo. En nuestro caso, empezamos hace casi cuatro años con un modelo piloto, cambiamos el modelo de negocio, el cliente objetivo, incluso reestructuramos el equipo. En este caso, el inversor invirtió en nosotros, en los fundadores, porque creía en nuestra visión, en nuestra misión y que nosotros podíamos darle la vuelta a Fabbric en caso de que fuera necesario y lograr éxito. Entonces, en momentos iniciales de la start up está muy vinculada al fundador. En un momento ya más de scale up, donde la empresa ya es mucho más grande, creo que sí que se puede desvincular más.
P.: ¿Qué hacen diferentes las start ups en términos de comunicación?
R.: La visibilidad en redes sociales es esencial porque al final en el mundo en el que vivimos, el mundo digital juega un papel fundamental en la visibilidad de la marca, sobre todo de las start ups.