Entorno

Portugal: cambio de signo en el socio preferente de la industria española

Los resultados electorales del pasado domingo han colocado a Luís Montenegro como líder del país luso para los próximos años. El nuevo dirigente se enfrenta a retos como la política de vivienda o el empleo.                 

Portugal: cambio de signo en el socio preferente de la industria española
Portugal: cambio de signo en el socio preferente de la industria española
Portugal es uno de los países europeos con la inflación más contenida y empezó 2024 con un repunte de los precios del 2,3% en enero.

Cristina Sanchis

12 mar 2024 - 05:00

En un año marcado por procesos electorales en todo el mundo, conflictos geopolíticos y la persistente incertidumbre macroeconómica, ¿a qué retos se enfrentan las principales economías del mundo? La serie Mercados estratégicos hace una radiografía de las principales potencias mundiales y analiza cuál es su relación con España, así como los principales desafíos a los que se enfrentan en los próximos años.

 

Mercados estratégicos

Radiografía de un mundo global

 

 

 

Terra da fraternidade, povo é quem mais ordena dentro de ti, ó cidade! Así es como empieza la canción Grândola, villa morena (en la versión original en portugués) que dio inicio, hace cincuenta años, a la Revolución de los Claveles, con la que se acabó la dictadura conservadora del general Salazar y empezó la democracia lusa. En su cincuentenario, los portugueses han celebrado la democracia precisamente volviendo a las urnas. Tras los comicios celebrados el pasado domingo, el pueblo portugués ha colocado al candidato de centroderecha Luís Montenegro al frente para los próximos cuatro años. Con la fuerza de quien empieza, el nuevo Ejecutivo se enfrenta a retos como la política de vivienda o el empleo, entre otros.

 

A falta de que se conforme el nuevo Gobierno, sobre el que todavía hay dudas de si formará parte la extrema derecha portuguesa, los indicadores macroeconómicos del país muestran la resiliencia de la economía lusa para 2024. El Producto Interior Bruto (PIB) de Portugal lleva desde 2013 aumentando (exceptuando el año de la pandemia). En 2023, el país elevó un 2,3% su riqueza, mientras que en 2022 y 2021 lo hizo un 6,8% y un 5,7%, respectivamente.

 

En concreto, Portugal anotó un PIB anual de 265.742 millones de euros en 2023, frente a 242.341 millones de euros del ejercicio anterior. Por su parte, en 2023 el PIB per cápita en el país fue de 25.760 euros, un alza del 9,5% en comparación con los valores de 2022.

La rápida recuperación de Portugal tras el frenazo de la pandemia, en comparación con otros países europeos, es una de las principales características que demuestran la salud financiera del país. En 2019 Portugal logró un ligero superávit del 0,1% del PIB, el primero desde 1974. En 2022, sólo dos años después de la pandemia, el país luso anotó un déficit del 0,4% del PIB, mientras que el déficit público de España se situaba en el 4,7% del PIB ese año.

 

 

 

 

Una de las claves del país para mantener un ritmo de recuperación tan elevado ha sido proteger el empleo durante los últimos años. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE) portugués, la tasa de desempleo en el país a cierre de 2023 fue del 6,5%, dos puntos porcentuales por debajo de 2022. Además, los últimos resultados publicados por la misma entidad muestran que el empleo y los salarios crecieron un 0,2% y un 5,9%, en enero, respectivamente.

 

La vivienda es uno de los grandes retos para el próximo mandatario. Como en el resto de economías europeas, el precio de la vivienda ha ido acelerando durante los últimos meses, convirtiéndose en un problema de accesibilidad para las gente más joven, que no puede permitirse la compra y alargan la situación de alquiler, también inflado. La derecha del país abogaba durante la campaña por aumentar el parque de viviendas, mientras que los postulantes socialistas defendían la bajada de los precios.

 

 

Tras el estallido de la guerra de Ucrania en 2022, los precios se dispararon en toda Europa y, pese a que han ido estabilizándose en los últimos meses, todavía está disparada en algunos territorios y es especialmente notable en algunos productos. Sin embargo, Portugal es uno de los países europeos con la inflación más contenida. El país luso empezó 2024 con un repunte de los precios del 2,3% en enero, siendo las comunicaciones y la vivienda los sectores más inflacionistas, con un alza del 4,2%.

 

Por su parte, la moda registró incluso un descenso de precios, de hasta el 3% en relación con el mismo periodo del ejercicio anterior. El equipamiento para el hogar también anotó tasas negativas con un descenso del 0,10%. El resto de sectores sí que aumentaron los precios en enero, pero todos de manera contenida. A cierre 2023, la inflación en Portugal era del 1,4%, mientras que en la moda lo sprecios disminuyeron un 0,9%.

 

Los datos contrastan con los registrados en España. Pese a compartir frontera, el negocio de la moda en España empezó el año con una inflación del 1,6% tras haberse ido moderando durante los doce meses anteriores. Aun así, la moda se situó como uno de los sectores menos inflacionistas, por debajo del IPC general que fue del 3,4% en enero.

 

En comparación con las principales potencias europeas como Alemania o Francia, la inflación también está más controlada en Portugal. Alemania empezó el ejercicio actual con un alza de los precios del 2,9% y sólo los precios de la moda subieron un 3% en el periodo, aunque también en este caso el sector también se mantuvo como uno de los más moderados. Francia, por su parte, anotó un aumento de los precios del 3,1% en el primer mes del año, aunque el Institut National de la Statisque (Insee por sus siglas en francés) no desglosa la inflación de la moda.

 

 

 

 

Pese a haberse recuperado rápidamente de los principales efectos de la pandemia, la desaceleración general del consumo es un escollo que Portugal, como el resto de países, no ha podido evitar. La situación macroeconómica y los conflictos bélicos, así como la inflación generalizada, han sido algunos de los motivos que han hecho que las exportaciones a los países europeos se frenen.

 

Portugal cerró 2023 con una reducción de las exportaciones del 1,1%, hasta 77.603 millones de euros. España es el principal cliente del país, seguido de Francia y Alemania, aunque las ventas de bienes se redujeron en los tres mercados, según datos publicados por el INE portugués. Sin embargo, la oficina no desglosa las caídas de las exportaciones por mercados y bienes en el conjunto del año.

 

Sólo en diciembre, Portugal exportó bienes a España por valor de 1.440 millones de euros, un 5,1% menos que en el mismo mes del ejercicio anterior. A Francia e Italia, la caída fue del 5% y del 10%, respectivamente. El dato contrasta con las exportaciones a Estados Unidos en el último mes del año, que se más que duplicaron. En total, Portugal exportó al país estadounidense bienes por valor de 709 millones de euros.

 

Las importaciones del país siguieron la misma tendencia, con una caída del 4,1% en comparación con el ejercicio anterior, hasta 104.959 millones de euros. El país del que más se aprovisiona Portugal también es España y en el último mes del año las importaciones descendieron un 4,3%, hasta 2.877 millones de euros. Alemania está en la segunda posición, con una caída del 15,1% en diciembre de 2023.

 

 

El país luso siempre ha sido un socio preferente para la moda española. La industria textil portuguesa está repartida por varias zonas dentro del país. El calzado se ubica en cerca de la localidad de Braga, mientras que la industria textil y de la confección se concentra en la Región Norte de Portugal, que linda con Galicia y donde tienen su sede grupos como Inditex, Sociedad Textil Lonia, Bimba y Lola o Adolfo Domínguez

 

Inditex concentra en Portugal uno de los mercados con mayor red comercial. En concreto, el gigante gallego tiene hasta 293 establecimientos en el país, sólo por detrás de España, Italia y México. La mayor presencia de Inditex en el país es a través de Zara, que tiene hasta 77 tiendas, aunque el grupo tiene presencia con todas sus cadenas. Pull&Bear es el segundo concepto con mayor penetración en el país, con 46 establecimientos.

 

Mango, por su parte, opera con 52 establecimientos propios en Portugal, su séptimo mercado por red comercial. Concretamente, la empresa tiene 31 establecimientos propios en el país y 21 tiendas franquiciadas. Tendam (dueño de marcas como Cortefiel, Women'secret, Pedro del Hierro, Springfield, Hoss Intropia, Slowlove, High Spirits, Ooto, Dash and Stars o Hi&Bye) cuenta con 159 tiendas en Portugal, el segundo mercado del grupo sólo por detrás de España. La cadena con más presencia es Springfield, con 63 tiendas.

 

Por otro lado, Adolfo Domínguez, que está inmersa en una estrategia de expansión internacional, abrió hace unos meses dos nuevas tiendas en Lisboa y Oporto, como parte de su ofensiva en el extranjero.