Privalia, nuevo cuartel general: deja el 22@ y se instala en L’Hospitalet

Privalia abandonará el 22@. La empresa de venta de stocks de moda por internet dejará sus emblemáticas instalaciones en el barrio barcelonés de Poblenou, en el antiguo taller de Loewe, para trasladarse a L’Hospitalet del Llobregat.

Las nuevas oficinas de Privalia estarán en el número 450 de Rambla Marina, en un edificio propiedad de Núñez i Navarro bautizado como Rambla Marina Factory. La empresa de moda catalana, que fue adquirida en 2016 por el grupo galo Vente Privee, hoy Veepee, ha alquilado 7.000 metros cuadrados de los 10.000 metros cuadrados que tiene el inmueble, que acaba de ser reformado por la inmobiliaria.

Los planes de Privalia son comenzar el traslado de los más de 700 trabajadores que concentra en sus actuales instalaciones de la calle Llull y de la calle Venezuela del 22@ a sus nuevas oficinas a partir de septiembre. Se trata de una zona en crecimiento, muy cerca de Plaza Europa (donde tiene su sede Puig, otro gigante de la moda) y de las instalaciones de Fira de Barcelona en L’Hospitalet. La operación ha contado con el asesoramiento de Savills Aguirre Newman.

Fuentes del sector apuntan a que el precio de alquiler del inmueble se sitúa en diez euros por metro cuadrado al mes. “Privalia ha apostado por un edificio de calidad, pero con un alquiler ajustado, y sobre todo por unificar sus dependencias de trabajo”, señalan las mismas fuentes. Las aún oficinas de Privalia en Llull son propiedad de un family office, que planea una reforma integral del inmueble a partir de 2023.

Esta es la segunda mayor operación de alquiler de Barcelona de este año, tras la firmada por Webhelp. La firma de servicios de empresa cerró en el primer trimestre el alquiler de 20.000 metros cuadrados en un edificio de Acciona y Tristan Capital Partners en el distrito 22@ de Barcelona.

Fundada por Lucas Carné y José Manuel Villanueva, Privalia pasó a manos de la francesa Vente Privee en 2016 a cambio de 44,1 millones de euros. La empresa suma más de mil trabajadores, la mayoría en las oficinas de Barcelona, aunque también cuenta con instalaciones en Madrid y Sevilla. 

En el año de la pandemia, marcado por el exceso de inventario en el sector por el cierre de tiendas, Privalia facturó 214,7 millones de euros en el mercado español, en línea con los 218,3 millones del año anterior, según las últimas cuentas de Privalia Venta Directa depositadas en el Registro Mercantil. La compañía logró mantener en negro el resultado neto, con un resultado de explotación de 62,3 millones de euros y un beneficio de 34,7 millones de euros, aunque muy por debajo de los 130,8 millones de euros que ganó en 2019.